El fichaje de Maksym Koval ha hecho obvio un overbooking en la portería del Deportivo de La Coruña. Si bien es cierto que el rendimiento de ninguno de los guardametas que han ocupado la portería gallega ha merecido la confianza, la llegada del ucraniano ha situado al club con cuatro porteros.
Rubén Martínez, Przemyslaw Tyton, Costel Pantilimon, más el ucraniano, completan la demarcación dentro de la plantilla a la que habría que sumar la presencia de Francis Uzoho, meta del filial y que viene apretando fuerte y mejorando las prestaciones de varios de los inquilinos en las filas del equipo de A Coruña. El club deberá dar salida antes del cierre del mercado a varios de estos nombres si no quiere continuar con una situación de sobrepeso en el puesto que acaba de reforzar.
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