Con uno de los presupuestos más bajos de la Liga, el Rayo Vallecano puede sacar pecho de situarse en una más que meritoria duodécima posición. Su buena temporada se basa en la entrega de los jugadores, la habilidad de Paco Jémez en el banquillo y, aunque muchas veces se pasa por alto, también por la labor de Felipe Miñambres, director técnico del club.
El encargado de confeccionar las plantillas rayistas termina contrato en junio y todavía no ha recibido una oferta de renovación, según asegura el portal Pasión por el Rayo. El presidente del conjunto vallecano, Ramón Martín Presa, cuenta con apenas tres meses para conseguir la continuidad del director técnico con el que se han conseguido objetivos que a menudo se antojaban casi inalcanzables.
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