Aunque ya era un secreto a voces (ver artículo), el propio David Fuster acaba de confirmar que abandona las filas del Villarreal para militar, durante las próximas tres campañas, en el Olympiakos griego.
«Es un gran oportunidad para mí y no podía dejarla escapar, ya que tanto en lo deportivo como en lo económico, era una muy buena oferta. Esta era una opción que apareció hace una semana y que desde el primer momento me gustaba, además era una buena oferta tanto para mí, como para el club. Y cuando interesa a las tres partes, lo lógico es que se cierre», explicó el jugador.
En la decisión final ha tenido mucho que ver la presencia de Ernesto Valverde en el banquillo del conjunto griego. «Fue el míster Valverde el que me llamó y me habló de esta opción, me convenció de que allí podía tener muchas opciones de jugar y de que era una muy buena oportunidad para mí. Y no lo he pensado dos veces», concluyó.
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