El preocupante inmovilismo del Bayern Múnich

El Bayern Múnich ha vivido esta semana su primera crisis de la temporada, algo inevitable por lo que pasan todas las grandes escuadras en un momento u otro del curso. En el caso del cuadro bávaro, como hay entrenador nuevo ha sido este último el gran señalado por los tres últimos empates.

Los bávaros acostumbran a dominar su campeonato de principio a fin y a reinar en su grupo de la primera fase de la Liga de Campeones sin problemas. Pero ya la temporada pasada sucedió algo similar cuando Carlo Ancelotti fue cesado y se escogió a Jupp Heynckes como su relevo, a la espera de un cambio de nivel en el banquillo que se produjo con la llegada de Niko Kovac, quien antes de desembarcar en el Allianz Arena privó a los bávaros de la Copa de Alemania en la final con el Eintracht de Frankfurt.

Y es que, desde que Pep Guardiola dejara la entidad en 2016, pese a sus diferencias claras con la directiva en los últimos tiempos, las aguas han corrido más turbulentas que nunca en este club. Aunque para ser justos hay que destacar que desde 2013 no logran pasar de semifinales en Liga de Campeones, cuando Heynckes estaba entonces al mando.

Necesidad de rejuvenecer la plantilla

Pese a que Guardiola cayó siempre en semifinales, mantuvo al equipo en un alto nivel competitivo, probó cosas nuevas y dio la alternativa a nuevos jugadores. No obstante, si analizamos cualquiera de los últimos encuentros, por ejemplo el de esta semana ante el Ajax de Amsterdam, vemos que la columna vertebral sigue siendo la misma.

Manuel Neuer, Jerome Boateng, Javi Martínez, David Alaba, Thomas Müller, Arjen Robben y Franck Ribéry repiten de aquel equipo que ganó e Wembley en 2013. Robert Lewandowski estaba entonces en el bando contrario, en el Borussia de Dortmund, pero los años van pasando por el polaco.

Este verano apenas contamos como fichajes destacados a los jóvenes Alphonso Davies y Leon Goretzka, que no requerían de grandes desembolsos. Pero el cambio generacional no llega en el equipo, que va cumpliendo años sin nuevas alternativas y se ha estancado entre los grandes de Europa. Hay tiempo para reaccionar.