Liga de Campeones | El PSV hace un favor al Tottenham y condena al Inter

Volvía Mauricio Pochettino al Camp Nou, donde logró hace casi una década su primera gran victoria como entrenador (1-2 con el Espanyol al equipo de Pep Guardiola que ganaría el Triplete). Y estadio donde fue un día deseado para el banquillo, algo que se encargó de rechazar públicamente por su amor incondicional al conjunto perico. Esta vez el Tottenham debía repetir la hazaña lograda por su entrenador, aunque a priori lo tendría más fácil por enfrentarse a un FC Barcelona plagado de suplentes, que aprovechaba su condición de líder inamovible del grupo para dar descanso a los más habituales. Luis Suárez descansaba en la grada su maltrecha rodilla mientras Lionel Messi se sentaba en el banquillo. Por tanto una ocasión de que el coliseo azulgrana viera a los menos habituales. Y los spurs ante la oportunidad quizás única de lograr un triunfo más que vital en uno de los grandes escenarios del continente. En el lado local, quedaba por ver cómo reaccionaría el Camp Nou al último episodio de Ousmane Dembélé, que el domingo llegó tarde de nuevo a entrenar y que según las últimas informaciones será multado.

Y si, de un plebiscito podía tratarse su presencia en el once, poco tiempo dejó el francés para las dudas. Porque en el minuto 10 aprovechaba un claro error de la zaga de los spurs para, exhibiendo toda su potencia y velocidad, así como su facilidad para conducir el balón con ambas piernas y su regate, plantarse ante Hugo Lloris con una genial jugada individual y anotar el primer gol. Un tanto muy celebrado por el estadio pese a la intrascendencia del choque, y en el que se exponían todas las virtudes del francés. Una diana que le daba margen tras lo sucedido esta temporada con sus retrasos, y que pone de manifiesto que pese a las dudas que lógicamente genera es un auténtico diamante en bruto para el club culé. Y un gol que noqueaba a los ingleses, que habían salido con mayores ganas como era de esperar por su situación en la clasificación. Además el gol dio confianza a los culés, que comenzaron a dominar el juego por medio de Ivan Rakitic y un gran Carles Aleñá, que demostraba por qué se ha ganado un sitio en el primer equipo. El croata estaba imperial como mediocentro y el canterano brillante en la asociación, escogiendo siempre la mejor opción.

Seguía sin convencer en cambio Philippe Coutinho, tan plano como su compatriota Arthur Melo. Quizás con ellos a otro tono los azulgranas podrían haber dominado más el choque, que fue transcurriendo mientras los ingleses tuvieron sus oportunidades para igualar. Harry Kane y especialmente Song Heung-Min se estrellaron ante un gran Jasper Cillessen, que quizás sería titular en muchas escuadras de primer nivel porque siempre que juega (y lo hace poco) está a un gran nivel. Su parada ante el coreano lo demuestra, siendo la oportunidad más clara del equipo de Mauricio Pochettino en el primer acto, que no lograba encontrar continuidad en su buen hacer ofensivo in argumentos de peso para inquietar a los locales.

¡¡GOOOOOOOOOL DEL BARÇA!! ¡¡GOOOOOOOL DE DEMBÉLÉ!! (1-0, min. 7) #BarçaSpurs pic.twitter.com/CDwgofkFtF

— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) 11 de diciembre de 2018

El segundo acto tuvo menos fútbol y pocas emociones hasta el final, cuando Lucas Moura lograba nivelar el duelo ya con Lionel Messi sobre el campo. Antes el Tottenham tuvo varias ocasiones claras desbaratadas por Jasper Cillessen, y también el cuadro culé pudo haberse adelantado, aunque perdió mordiente, ganas y fútbol ofensivo en el segundo acto. Mientras el equipo de Mauricio Pochettino buscaba ese gol que le diera el pase a los octavos de final, sabiendo que el Inter no podía ganar al PSV Eindhoven. En esa segunda parte los ingleses merecieron más y acabarían encontrando el premio, con la citada diana del jugador brasileño.

Un gol que acabó por dejar al equipo londinense en la siguiente ronda, ya que el 1-1 de ambos encuentros de este grupo B deja las cosas como estaban. Los azulgranas salvaron la papeleta con los suplentes y dieron buena imagen y los ingleses se marchan de la ciudad condal más que satisfechos al seguir vivos en la competición. En el FC Barcelona hemos visto buenos detalles de Dembélé o Carles Aleñá, además de a un soberbio Jasper Cillessen. Y los spurs quieren seguir creciendo y mejorar el resultado de la temporada pasada en Europa, tras haber sometido a los locales hoy en la segunda parte.

El Inter se la pega ante la Cenicienta

Otra de las dudas de este grupo B estribaba en saber si era mejor tener que ir a jugarte la clasificación al Camp Nou dependiendo de ti mismo o tener un partido en casa ante la cenicienta del grupo pero tener que estar pendiente de otro resultado. Seguro que tendrán opiniones para todos los gustos, pero como el fútbol es impredecible, pronto vimos que Hirving Lozano (13') adelantaba al PSV Eindhoven en el Giuseppe Meazza. Un gol que llegaba al poco tiempo del de Ousmane Dembélé en Barcelona y que dejaba la segunda plaza del grupo con tantas incógnitas (o más) que antes. Cierto es que antes del gol el combinado lombardo dispuso de hasta cinco ocasiones claras, con una al palo incluida, pero no vio portería. Y en cambio desde ese gol a los de Luciano Spalletti les costó mucho más tener fluidez en su juego.

Pero los equipos italianos siempre tienen muchas vidas. Y aunque el conjunto de Marc Van Bommel supo plantar cara a su rival y mantener el resultado con sus buenas armas. Hasta que Mauro Icardi vio portería en el 71'. El gol esperado por parte de la afición nerazzurra. El argentino, que es el encargado de tirar siempre del carro en este club que quiere reverdecer viejos laureles con un proyecto interesante, acudía fiel a su cita mientras los aficionados locales suspiraban porque no se moviera el marcador en Barcelona. Algo que acabó por suceder con el tanto de Lucas Moura, de manera que a los italianos solamente les valía la victoria y no el empate. Y ese gol no llegó, pese a la última gran ocasión desperdiciada por Mauro Icardi al final. Una diana que habría cambiado el grupo, pero que deja al equipo nerazzurro en la tercera plaza y tendrá que conformarse con la Europa League,