Marcelo deslumbra y Cristiano Ronaldo ejecuta: El Real Madrid ya está en semifinales de Champions League

Por Iván Vargas
5 min.
Real Madrid CF @Maxppp

El actual campeón de Europa se convierte en el primer equipo que alcanza las semifinales de la Liga de Campeones en siete ocasiones consecutivas.

Dos colosos se citaban hoy en el Santiago Bernabéu. Real Madrid y Bayern Múnich. 16 títulos de campeón de Europa entre ambos, ahí es nada. Con el estadio merengue como testigo de excepción, dos de los conjuntos más importantes de la historia del fútbol mundial volvían a reunirse después de un partido de ida en el que el equipo de Zinedine Zidane golpeó primero.

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Lo hizo llevándose una victoria que se antojaba terriblemente complicada cuando en el minuto 44 Arturo Vidal tenía la oportunidad de poner el 2-0 en el marcador desde el punto de penalti. Sin embargo, el lanzamiento del chileno se fue al limbo y los blancos lograron dar la vuelta en una segunda parte magnífica que terminó con 1-2 pero bien podía haber finalizado con una goleada a favor de los visitantes.

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Con el optimismo de haber estado sobre la lona y poderse levantar para la vuelta, la escuadra bávara acudía al estadio de Chamartín con el claro objetivo de remontar la eliminatoria. Para ello, un viejo conocido de la afición local como Carlo Ancelotti podía contar con el gran ausente de la ida, el polaco Robert Lewandowski que se ha convertido en pesadilla del Real Madrid desde aquel 23 de abril en el que marcó un póker a los blancos con la elástica del Borussia Dortmund.

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Arranca el Bayern Múnich… y reacciona el Real Madrid

Entró bien en el encuentro un Bayern Múnich que presionaba la salida de balón de los locales e intentaba hacerse con el control. El Real Madrid, por su parte, apostaba por las jugadas largas y elaboradas para desactivar a los germanos y pese a decantarse de inicio por una salida en rombo, el dibujo no tardó en transformarse en un 4-4-2. Los minutos iban pasando mientras la escuadra de Carlo Ancelotti ejercía de dominador… hasta que llegó el minuto 25. Los fallos de circulación del equipo alemán en su centro del campo, debido en gran medida al pobre partido de Xabi Alonso, provocaban que el Real Madrid se fuera encontrando cada vez más cómodo e incluso comenzará a disponer de las primeras oportunidades (Carvajal y Sergio Ramos). Por si esto fuera poco los de Carlo Ancelotti comenzaban a evidenciar claros síntomas de cansancio cuando se había alcanzado el primer tercio de choque y los locales recuperaban el balón cada vez antes y más arriba.

Sin embargo, pese a que a tenor de las ocasiones de las que dispusieron eran los locales los que deberían haberse ido con ventaja al túnel de vestuarios -Toni Kroos tuvo tres claras y Cristiano Ronaldo podría haber sumado alguna muesca más en su revólver de esta Champions League- el resultado después de los primeros cuarenta y cinco minutos era de empate a cero.

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Una segunda mitad de locura

Sin embargo, algo cambió en el vestuario. Un equipo que parecía muerto en gran parte del primer tiempo como el Bayern Múnich irrumpió en escena con renovados bríos y en apenas 7 minutos metía el miedo en el cuerpo a todo el Santiago Bernabéu. Era merced a un penalti de Casemiro sobre el holandés Arjen Robben que transformaba Robert Lewandowski. El gol trastocaba los planes de un Real Madrid que asistía atónito al renacer de los de Carlo Ancelotti frente a sus narices. El gigante germano iba creciendo más y más con el balón en su poder mientras el Real Madrid se dedicaba a perseguir sombras. Los blancos estaban ahora metidos en su área y únicamente se dedicaban a despejar balones, aunque el dominio visitante no terminaba de traducirse en ocasiones claras.

Y en estas estaba el partido cuando apenas dos minutos sirvieron para dar un giro radical a la eliminatoria. Cristiano Ronaldo ponía el 1-1 en el marcador en el minuto 76 y disparaba la euforia local, pero en el 78 un rebote de Sergio Ramos que se colaba manso en la portería de Keylor Navas igualaba la eliminatoria cuando nadie lo hubiera esperado. Un remate de córner, un penalti y un tanto en propia puerta eran suficientes para que el Bayern Múnich se sostuviera en una eliminatoria que iba camino a la prórroga.

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Finalmente ninguno de los dos conjuntos vio puerta y nos fuimos al tiempo suplementario, si bien una acción iba a marcar esos treinta minutos: la expulsión por doble amarilla de Arturo Vidal, que tuvo que abandonar el campo en el minuto 85 y dejaba a los suyos con diez en el momento clave.

Cristiano Ronaldo emerge en la prórroga

Y en la prórroga volvió a emerger el Balón de Oro. Después de un partido de ida en el que ya sumó dos tantos y demostró el porqué de su estatus en el mundo del fútbol, y un primer zarpazo en esta vuelta para poner el 1-1, Cristiano Ronaldo sumaba dos nuevos goles para redondear la eliminatoria y dar la clasificación a semifinales. El primero en la recta final del primer tiempo para empatar el encuentro (2-2) a pase de Sergio Ramos y el segundo ya en la segunda parte suplementaria rematando a puerta vacía una excepcional jugada del brasileño Macelo. De este modo, son 5 los goles que el portugués ha sumado en esta espectacular eliminatoria.

Ya con todo decidido, Marcos Asensio completaba la eliminatoria en el 112 con el 4-2 después de una jugada individual finalizada con maestría y dejaba completamente hundidos a los de Carlo Ancelotti. De este modo, el Real Madrid alcanza su séptima semifinal consecutiva de la máxima competición continental y sigue con una racha que comenzó en 2011.

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