Mundial 2018 | Bélgica emite destellos y golea a Túnez

Por Juan C. Navarro
4 min.
El futuro de Eden Hazard pasa por el Chelsea @Maxppp

Aunque no firmó un partido redondo, la Selección de Bélgica demostró que necesita muy poco para perforar la portería rival. Frente a una voluntariosa Túnez, los de Roberto Mártinez volvieron a exhibir ese estilo tan irrregular que tan pronto les convierte en un equipo temible como una escuadra vulnerable. El 5-2 final es un fiel reflejo de lo que hoy en día es este combinado.

En cada partido, Bélgica se enfrenta al rival de turno y a sí misma. Los diablos rojos tienen al enemigo en casa. Por alguna razón que cuesta comprender, el mismo equipo que a ratos deslumbra y parece un ciclón de repente se desconecta y se transforma en un combinado fallón que pierde balones sencillos y defiende sin apenas intensidad.

Sigue después de este anuncio

Ante Túnez, los de Roberto Martínez volvieron a interpretar como nadie ese papel de Dr.Jekyll y Mr. Hyde. De hecho, en la primera parte, el equipo fue una auténtica montaña rusa. De 15 minutos maravillosos, en los que el balón se movió al ritmo que marcaban Eden Hazard y Dires Mertens, se pasó a casi media hora de fútbol más bien plano que sirvió para dar vida a un rival que encontró numerosas grietas en la parcela defensiva. Eso sí, justo antes de que el colegiado enviase el partido al descanso, volvió a aparecer la Bélgica lúcida, ésa que puede matarte con apenas un par de pases y que invita a soñar con metas mayores.

Leer La cláusula de Bruno Guimaraes tiene fecha de caducidad

Estos vaivenes quedaron claramente reflejados en el marcador. Al cuarto de hora, los europeos ganaban con comodidad por 2-0, gracias a los tantos de Hazard de penalti y de Romelu Lukaku, tras un sensacional pase de Mertens. En el 17, el luminoso recogía un 2-1, después de que en uno de los múltiples despistes de la zaga, Dylan Bronn cabecease una falta lateral al fondo de la red. Alrededor de la media hora, daba la sensación de que Túnez podía empatar en cualquier momento. Y ya con el primer acto agonizando, en otra acción vertiginosa, Lukaku subia el 3-1 con el que se llegó a la pausa. Euforia, decepción, miedo y otra vez euforia.

Sigue después de este anuncio

Bélgica exhibe su pegada

Ya que el marcador estaba más o menos claro, quedaba por ver qué Bélgica nos encontraríamos en la reanudación. De entrada, volvió el equipo impreciso y frágil, el que se empeña en dar vidas extra a sus rivales. Eso sí, esta vez, la versión angustiosa apenas duró 5 minutos. En el 50, en otro fogonazo, Hazard recoge un balón largo enviado por Toby Alderweireld, se planta ante Ben Mustapha, le quiebra con elegancia y firma el 4-1.

Lo que vino después fue ya poco menos que intrascendente. Aunque restaban 40 minutos de juego, el partido fue apagándose a medida que Martínez fue retirando del campo a Lukaku y Hazard, dos jugadores que tendrán que ejercer el liderazgo cuando lleguen los partidos verdaderamente complicados. Eso sí en los estertores del choque, Michy Batshuayi primero y Wahbi Khazri después volvieron a ver puerta y dejaron el marcador final en un más que llamativo 5-2 que viene a reflejar lo que es hoy en día la realidad de Bélgica.

Sigue después de este anuncio

Por cierto, de Túnez, selección que ya ha quedado eliminada, se puede decir más o menos lo mismo de siempre, que con voluntad, valentía e ilusión no basta para sobrevivir en este torneo. A las Águilas de Cartago volvió a penalizarles su falta de solvencia defensiva, su tendencia al individualismo y la enorme falta de pegada. Tal vez con el lesionado Youssef Msakni en la escuadra, la historia podría haber sido algo diferente.

MVP | Con Eden Hazard entonado, todo es más fácil

Eden Hazard es un fiel reflejo de lo que hoy en día es la Selección de Bélgica. Si tiene el día bueno, su actuación puede resultar decisiva. En cambio, si salta al campo con el cable cruzado, puede transformarse en casi un jugador invisible. Afortunadamente para los diablos rojos, ante Túnez, compareció su mejor versión.

Sigue después de este anuncio

El futbolista del Chelsea se ofreció constantemente, se movió con criterio y evidenció ese desbordante talento que, en su momento, le sirvió para ser catalogado como uno de las más firmes promesas del fútbol europeo. Aunque para ello debería ofrecer este nivel en los choques verdaderamente decisivos, tal vez podamos estar ante el torneo que al fin encumbre al de La Louvière .

Sigue después de este anuncio

Noticias

Sigue después de este anuncio