Europa League | Dimitri Payet guía al Olympique de Marsella a las puertas de la final

Por Iván Vargas
3 min.
Olympique Marseille @Maxppp

El conjunto francés hace valer el factor campo y deja muy tocado a un Salzburgo obligado a una auténtica machada en la vuelta si quiere estar en la final de Lyon.

Mientras los ojos del prácticamente todo el mundo del fútbol estaban puestos en Londres y el partido que enfrentaba a Arsenal y Atlético de Madrid, en Francia se jugaban la otra plaza para la final que se disputará en Lyon el próximo 16 de mayo. Pese a que en un principio cualquiera de los dos podría partir como convidado de piedra a la vista del rival que saldrá de la otra semifinal, Olympique de Marsella y Salzburgo han dado claras muestras en durante su periplo en la Europa League que son rivales muy a tener en cuenta.

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Especialmente brillante está siendo el cuadro francés. Comandado por un sensacional Rudi García desde el banquillo,la escuadra de la Costa Azul ya se ha llevado por delante a Sporting de Braga, Athletic de Bilbao y Leipzig. Gran importancia de su buena trayectoria ha estado en el Vélodrome, donde se ha mostrado intratable.

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La presión ejercida por sus 60.000 enfervorecidos espectadores ha sido un espectacular valor añadido a la notable calidad que tienen los Bouna Sarr, Florian Thauvin o Dimitri Payet tienen en sus botas. Precisamente de una buena acción entre los dos últimos nacía el primer tanto del partido. Aún no habíamos alcanzado el cuarto de hora cuando el extremo utilizaba el guante que tiene en su pierna derecha para enviar un saque de falta prácticamente perfecto que remataba el de Orléans con la cabeza y la mano y se convertía en el uno a cero. Mención especial merece la gran temporada la que está protagonizando el citado Thauvin, que hasta la fecha ha sido protagonista en 40 tantos (23 goles, 17 asistencias) de los suyos.

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Rivales ya en una fase de grupos en la que los austriacos quedaban por delante, los dos equipos sabían lo que tenían delante. Los austriacos intentaban controlar el juego mientras los locales aprovechaban la velocidad de sus atacantes para generar peligro. Sin embargo, el gol había tenido un efecto narcótico y al partido le bajaron las pulsaciones. Apenas un par de latigazos lejanos fueron el argumento ofensivo de cada equipo en lo que restaba de primera mitad. Fue precisamente con ventaja mínima para los locales como se alcanzó el descanso.

Consciente de las dificultades que entrañaría el partido de vuelta en caso de caer en tierras francesas y no ver puerta,la escuadra austriaca decidió centrar sus esfuerzos en la segunda mitad en hacer lo que mejor sabe: atacar. Así, las primeras ocasiones de la segunda mitad fueron para los visitantes, aunque fueron resueltas por Yohann Pelé. Y cuando parecía que el Salzburgo podía lograr el empate, la teoría de la manta hizo acto de presencia.

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Con el equipo más volcado en el ataque, el Olympique de Marsella supo aprovechar un error de los austriacos para poner el 2-0. Lo hizo por medio de un brillante contrataque que culminaba Njie apenas cuatro minutos después de comparecer en el campo en lugar de Maxime Lopez. La asistencia fue nuevamente de un Dimitri Payet empeñado en llevar a los suyos a Lyon (3 goles, 5 asistencias en Europa League). Era el minuto 63 y los galos ponían la eliminatoria muy a su favor.

Con la eliminatoria prácticamente en el bolsillo, el Olympique de Marsella asistía cómodamente al paso de los minutos aunque el Salzburgo tenía algunas ocasiones importantes de gol. Especialmente significativa fue el tiro de Gulbrandsen desde el punto de penalti (minuto 77) que acabó en el poste de la portería de un ya batido Pelé. Sin embargo, todas las acometidas visitantes quedaron en maletas de un viaje a ninguna parte y son los marselleses los que ponen un pie en la final.

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