José Mourinho vuelve a la casilla de salida para tomar impulso

La llegada de José Mourinho al Manchester United el pasado verano era algo por todos esperado desde hace años. El técnico portugués, que tiene a Alex Ferguson como uno de sus grandes referentes, siempre ha mostrado su deseo de sentarse en el banquillo de Old Trafford. ¿Y qué mejor momento que después de las malas temporadas protagonizadas por los diablos rojos a las órdenes tanto de David Moyes como de Louis van Gaal?

Sin embargo, y al contrario de lo que hubieran deseado los aficionados de United, la primera temporada de The Special One al frente del equipo no ha sido todo lo buena que se hubiera esperado. Sexto clasificado en la Premier League después de ser el conjunto que más veces ha empatado (15) en la competición doméstica, la final de Europa League se presenta hoy como una oportunidad para dar un impulso al proyecto.

Y es que de alzarse con el segundo título continental que se disputa hoy en Estocolmo, el Manchester United tendrá la oportunidad de disputar la próxima edición de la Liga de Campeones, gran objetivo a comienzo de curso. Se trata además, de una oportunidad para que el luso vuelva a levantar un título que ya logró con el Oporto en 2003, precisamente un año antes de lograr la Liga de Campeones con los dragones. El portugués destacó ayer visiblemente compungido que «Estamos tremendamente tristes por el suceso trágico de ayer por la noche. No podemos dejar de pensar en ello y nuestros pensamientos nuestro amor está con las víctimas y sus familias», antes de añadir que «Tenemos un trabajo que hacer y viajaremos a Suecia a hacer ese trabajo. Es una pena que no podamos viajar con la alegría con la que siempre solemos tener antes de un gran partido como el de mañana».

De vuelta a un punto de partida que ya conoce de años atrás, el que fuera entrenador de Inter de Milán y Real Madrid espera que el impulso que le daría al club alzarse con la Europa League –y la consiguiente disputa de la Champions del curso que viene- sea al inicio de un ciclo victorioso en un Manchester United que de poder jugar la máxima competición continental multiplicará sus gastos en el mercado de fichajes.