Athletic Club: ¿Se puede sobrevivir sin fichajes?

El Athletic Club tendrá que superarse a sí mismo una vez más. El singular equipo vasco afrontará la nueva temporada con prácticamente la misma plantilla que cubrió la campaña 2015-2016. Que haya sido el único club de la Liga Santander que no ha invertido ni un solo euro en fichajes evidencia el mayúsculo reto al que se enfrenta el conjunto que dirige Ernesto Valverde.

Durante el recién concluido mercado, el cuadro vasco no se quedó con los brazos cruzados. La directiva encabezada por Josu Urrutia negoció la incorporación del lateral César Azpilicueta (Chelsea) y el extremo Alex Berenguer (Osasuna), pero lo cierto es que las conversaciones por ambos jugadores se vieron frenadas por las elevadas exigencias de sus respectivos clubes. Es más, algunos medios llegaron a indicar que los rojiblancos estaban dispuestos a lanzar una ofensiva por el centrocampista Mikel Oyarzabal, pero lo cierto es que estas informaciones respondían más a una maniobra de su agente, que acto seguido logró una suculenta renovación con la Real Sociedad, que a un interés real.

Sin fichajes que llevarse a la boca, tanto el técnico cacereño como la afición deberán conformarse con el ascenso de tres jugadores del filial -el central Yeray Álvarez, el lateral zurdo Enric Saborit (por segunda vez) y el centrocampista Mikel Vesga-, y con la vuelta de un cedido, el prometedor meta Kepa Arrizabalaga.

Curiosamente, y pese a la escasez de refuerzos, el número de bajas sufridas por la escuadra ha resultado considerable. Unai Bustinza (rumbo al Leganés), Jon Aurtenetxe (MIrandés), Erik Morán (Real Zaragoza), Ibai Gómez (Alavés), Borja Viguera (Sporting de Gijón) y Guillermo (Elche) se han despedido definitivamente de un club que también ha favorecido las cesiones de Kike Sola (Getafe), Unai López (Leganés), Óscar Gil (Real Oviedo), Alex Remiro (Levante), Markel Etxebarria (Real Valladolid), Urtzi Iriondo (Elche) y Gorka Santamaría (Cádiz). Por cierto todas estas salidas tampoco han reportado ni un solo euro a las arcas.

Aunque aún es pronto para sacar conclusiones (apenas se llevan disputadas dos jornadas), lo cierto es que el arranque del curso ha constatado que mantener el nivel exhibido en los últimos cursos será este año un poco más difícil para los bilbaínos. Con Aritz Aduriz camino de los 36 años, Raul García aún alejado de su mejor momento físico y varios jugadores inmersos en un preocupante estancamiento (Iker Muniain, Ander Iturraspe o Markel Susaeta son los mejores ejemplos), serán los jóvenes Iñaki Williams o el brillantemente renovado Aymeric Laporte quienes tengan que dar un paso al frente para garantizar la supervivencia del equipo.