Athletic: Las "víctimas" de Marcelo Bielsa

Algunos le idolatran sin casi prestar atención a los resultados que obtienen sus escuadras, otros le critican con dureza por sus arriesgados planteamientos y por su intento de cambiar el estilo de juego de una escuadra histórica... Marcelo Bielsa no deja a nadie indiferente.

Desde que aterrizó en el Athletic de Bilbao, el preparador argentino ha tomado una serie de decisiones que dividen a la parroquia rojiblanca. Despreciar el balón en largo en busca de Fernando Llorente, situar a Carlos Gurpegui en el lateral derecho en detrimento del intachable Andoni Iraola, apostar por Javi Martínez como central o utilizar a Óscar de Marcos como comodín (lateral izquierdo, mediocentro, extremo o mediapunta) han sido algunas de sus controvertidas decisiones, pero no las únicas.

Y es que, basta con echar un vistazo al banquillo y a la grada de San Mamés para encontrarse con futbolistas que, en apenas unos meses, han perdido casi todo el protagonismo que habían acumulado bajo la dirección de Joaquín Caparrós.

El caso más evidente es, sin duda, el de Koikili. El lateral zurdo accedió al club por la puerta de atrás y sin casi hacer ruido, pero su trabajo, constancia y sacrificio le han permitido acumular 98 partidos oficiales con la elástica rojiblanca. Este curso, no hay ni rastro de Koi. El de Otxandio se entrena con el resto del grupo pero Bielsa ni se anima a incluirle en una convocatoria.

Perdida de protagonismo

En una situación parecida se encuentran otros dos futbolistas que sustentaron al conjunto vasco el curso pasado: Mikel San José (31 partidos de Liga) y David López (28). El central fue titular en las dos primeras jornadas de Liga, pero la recuperación de Borja Ekiza y las incursiones de Javi Martínez en el eje de la zaga, han terminado por alejarle del indiscutible Fernando Amorebieta. El riojano, por su parte, fue uno de los jugadores que tiró del carro en la recta final de la anterior campaña, y en la actual, su participación se resume en 60 minutos repartidos en tres partidos.

También ha perdido su papel decisivo el incombustible Gaizka Toquero. El punta se ganó a pulso la veneración de San Mamés, pero el Loco le ha arrebatado su papel de brillante escudero de Llorente para convertirle en un simple revulsivo (ha disputado 8 partidos, pero nunca más de 25 minutos). Tal vez el Lehendakari y el resto de víctimas del nuevo técnico bilbaíno vean este año el mercado de invierno con otros ojos. Al tiempo.