El FC Barcelona cierra la puerta a sus cedidos

En principio, el objetivo primordial de una cesión es el de dar al futbolista implicado la oportunidad de acumular los minutos que en su club de origen no puede sumar y el de, por tanto, concederle una opción de reivindicarse y hacer méritos para poder regresar en el futuro con renovadas aspiraciones. Sin embargo, en muchas ocasiones, los clubes recurren a esta vía para deshacerse de jugadores que no entran en sus planes y que aún mantienen contrato en vigor.

Un buen ejemplo de esta segunda manera de actuar lo encontramos en el FC Barcelona. De hecho, una información que hoy publica el diario Mundo Deportivo deja absolutamente claro que la entidad culé no tiene intención alguna de dar una nueva oportunidad a ninguno de los futbolistas que se encuentran actualmente cedidos en otros conjuntos.

Según explica el rotativo, los azulgranas pretenden aprovechar el próximo mercado para hacer caja con la definitiva venta del portugués André Gomes (actualmente prestado al Everton), el gallego Denis Suárez (Arsenal) y al catalán Sergi Palencia (Girondins de Burdeos). Tampoco regresarán al Camp Nou ni el brasileño Douglas Pereira, que acaba contrato en verano y que actualmente juega cedido en el Sivasspor , ni el turco Arda Turan. En este último caso, el futbolista permanecerá en el Istanbul Basaksehir, combinado con el que se pactó un préstamo hasta 2020, fecha en la que expira su compromiso.

Aunque no fue cedido, sino traspasado al Eibar con opción de recompra, el joven Marc Cucurella vivirá un proceso similar. El Barça le recuperará en verano por unos 4 M€ y acto seguido propiciará su venta por una cantidad mayor. Ya que el versátil carrilero ha crecido considerablemente en el último año, la entidad confía en obtener un importante botín con su traspaso.