Tras el no de Kepa Arrizabalaga, arquero que ha terminado ampliando su compromiso con el Athletic Club, el Real Madrid se ha visto obligado a pasar página y elaborar un nuevo plan para mejorar las prestaciones de su portería de cara al curso que viene.
Ayer mismo, el Athletic Club anunciaba la renovación de Kepa Arrizabalaga y ponía fin a unas ya interminables semanas de especulaciones. El arquero, que parecía estar a un paso del Real Madrid y que, incluso, llegó a pasar el pertinente reconocimiento médico, se cansó de esperar a una escuadra blanca que no terminaba de dar el paso definitivo y optó por ampliar su compromiso con el combinado vasco.
Tras asumir este varapalo, el cuadro de Chamartín ha puesto en marcha su plan B. Éste pasa por, tal y como cuenta el diario As, volver a estudiar el fichaje de tres guardametas que siempre han resultado del agrado del club y que se han paseado en multitud de ocasiones por su agenda: el belga Thibaut Courtois, el español David de Gea y el esloveno Jan Oblak.
De acuerdo a esta fuente, el fichaje del primero sería, a día de hoy, el más asequible. Aunque en fechas recientes, el cancerbero llegó a indicar que el acuerdo para renovar su compromiso con el Chelsea «está cerca», los últimos acontecimientos podrían haber dado pie a un nuevo escenario en el que el internacional belga estaría valorando seriamente la posibilidad de estudiar una oferta del equipo merengue.
Las otras dos alternativas se antojan, a priori, más complicadas. En el caso de De Gea, porque el Manchester United ya está tratando de blindarle, y en el de Oblak, porque la cláusula de rescisión del contrato que le vincula con el Atlético de Madrid se sitúa en 100 M€ y porque otros clubes de la talla de París Saint-Germain y Juventus también están valorando seriamente su contratación.
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