Basilea: El silencioso exportador de talento
La escuadra suiza se ha especializado en los últimos años en vender a sus mejores jugadores a escuadras con mayor potencial económico.
No ha alcanzado las cifras de clubes como Oporto o Benfica, que han conseguido traspasos estratosféricos, pero el Basilea también sabe sacar rendimiento a sus jóvenes perlas. De hecho en los últimos años ha logrado vender a varios jugadores que ahora son estrellas por precios nada despreciables.
Hace ya siete años, Felipe Caicedo e Ivan Rakitic dejaron 7 y 5 M€ respectivamente en las arcas de este club, cuando eran solamente promesas. En 2009 Eren Derdiyok fue traspasado por 4 M€ al Bayer Leverkusen, y Samuel Inkoom aterrizó en 2010 en el Dnipro a cambio de 5 M€.
Pero ha sido en los dos últimos años cuando mayor rendimiento ha logrado obtener el conjunto helvético. Granit Xhaka fichaba en 2012 por el Borussia de M’gladbach a cambio de 8,5 M€; mientras que Xherdan Shaqiri dejaba en las arcas del club suizo 11,8 M€ con su traspaso al Bayern Múnich. Y en el mercado estival fue Aleksandar Dragovic el que era traspasado al Dinamo de Kiev a cambio de 9 M€; y en enero Mohamed Salah fichaba por el Chelsea por 13,2 M€.
Una gran recompensa sin duda para un equipo que apuesta por las jóvenes promesas. Pero parece que la producción no se ha terminado, ya que jugadores como Yann Sommer o Fabian Schär pueden ser los siguientes. Al menos esto dicen los últimos rumores.
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