Los decepcionantes resultados deportivos que está cosechando el Chelsea en el arranque de curso han desembocado en un sinfín de problemas extradeportivos que podrían terminar arruinando la carrera del técnico de Setúbal.
José Mourinho vuelve a toparse con viejos fantasmas. Al igual que le ocurrió en el Real Madrid, el ahora técnico del Chelsea comienza a tener evidentes problemas con varios integrantes de la plantilla londinense.
Según relata The Guardian, la decisión de ni siquiera llevar convocados a Loïc Remy, Oscár y Radamel Falcao al encuentro que el pasado martes midió al Oporto con el Chelsea no ha sentado nada bien dentro de un vestuario que cree que el luso ha empleado a estos tres futbolistas como «chivos expiatorios» después de las críticas vertidas hacia el mal juego desplegado por el equipo en el choque de Premier League ante el Newcastle.
Los pesos pesados tampoco están nada conformes con la decisión de Mou de apartar de los onces iniciales a John Terry. El eterno capitán ha sido desplazado al banquillo por la pareja conformada por Gary Cahill y Kurt Zouma, quienes tampoco han logrado dotar al equipo de la estabilidad defensiva necesaria para poder sacar adelante los partidos. Es más, en este caso, hasta los propios aficionados se han dirigido al de Setúbal para pedirle la inmediata vuelta del internacional inglés.
Este choque con algunos de sus futbolistas más importantes se suma al incidente que ya protagonizó el luso con la doctora Eva Carneiro, y que podría obligarle a pasar por los juzgados, o a las continuas críticas de la prensa por su incapacidad para dotar a su equipo de un estilo de juego convincente. Sin duda, este inicio de temporada se ha convertido para Mourinho en un auténtico calvario.
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