Tras la disputa del Mundial de Rusia, el belga Thibaut Courtois se reunirá con la directiva del Chelsea para analizar su futuro. El arquero está molesto por la sucesión de informaciones en la que se asegura que los blues desean reclutar un nuevo portero.
Thibaut Courtois está, como se suele decir coloquialmente, con la mosca detrás de la oreja. El arquero, que ya está concentrado con la Selección de Bélgica para preparar el inminente Mundial de Rusia, ha constatado un evidente crecimiento de las informaciones que relacionan al Chelsea con un nuevo portero y no termina de entender el motivo.
Por eso, tal y como cuenta el London Evening Standard, el cancerbero ya se ha puesto en contacto con la directiva de los blues para concertar una reunión que tendrá lugar una vez concluya su participación en el torneo mundialista y en la que se abordará su futuro dentro de la entidad.
Si en dicho encuentro las partes no son capaces de entenderse y pactan una renovación de su actual contrato (finaliza en junio de 2019), lo más lógico es que el club valore la venta de su pupilo para evitar que se marche justo dentro de un año sin dejar ni un solo euro en las arcas.
Aunque se sabe que Thibo mantuvo una reunión informal con directivos del PSG hace unos meses, parece claro que serían Real Madrid y Atlético de Madrid los grandes favoritos para hacerse con sus servicios. Eso sí, en el caso de los colchoneros, su hipotética oferta quedaría condicionada a la previa marcha del esloveno Jan Oblak.
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