Autor de una brillante temporada, el atacante brasileño Philippe Coutinho se ha abierto paso en la agenda de un club que parece empeñado en mejorar sus prestaciones a golpe de talonario, el París Saint-Germain.
La inesperada eliminación en los cuartos de final de la Champions League, a manos de un Manchester City que en semifinales demostró ser un equipo escasamente competitivo, sigue escociéndole, y mucho, al París Saint-Germain. Basta con escuchar a su presidente, Nasser Al-Khelaïfi, para comprobarlo. «Reflexiono en lo ocurrido y sí, hay que hacer grandes cambios y además hay que hacerlos esta temporada. Después de cinco años hay que comenzar un nuevo ciclo», espetó en una entrevista concedida en las últimas horas a Le Parisien.
Para lograr que su equipo resulte realmente competitivo lejos de tierras francesas, la entidad está dispuesta a tirar nuevamente de talonario. Y entre sus planes, además de sentar a Diego Simeone en el banquillo, figura la contratación de un futbolista que ha evolucionado considerablemente en las últimas temporadas, el brasileño Philippe Coutinho (23 años).
Reclutado por el Liverpool durante el verano de 2013 (por unos 10 M€), el atacante ha ido mejorando sus prestaciones a medida que pasaban los cursos hasta erigirse en el principal arma ofensivo de un conjunto inglés con el que esta temporada ha disputado 43 partidos oficiales y ha anotado 12 tantos.
Consciente de que sacarle de Anfield Road no será sencillo, la entidad parisina se ha mostrado dispuesta a invertir hasta 48 millones de libras en su contratación (alrededor de 60 M€), una cifra que, tal y como señala el Daily Star, sin duda podría provocar una nueva fuga en un club que últimamente ha sufrido la marcha de delanteros en pleno apogeo como Luis Suárez o Raheem Sterling.
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