Dispuesto a dar un nuevo impulso a su ya envidiable plantilla, Roberto Mancini se tomó la molestia de viajar hasta Francia para espiar personalmente a uno de sus grandes objetivos para el curso que viene.
Las gradas del estadio Métropole contaron el pasado fin de semana con un espectador de renombre, el italiano Roberto Mancini. El objetivo del preparador del Manchester City no era otro que vigilar de cerca a uno de los grandes objetivos de su club para el curso que viene: el belga Eden Hazard (21 años).
La impresión que debió llevarse el técnico no pudo ser mejor, ya que el extremo cuajó un sensacional partido y anotó el primer tano de la goleada que infringió su equipo, el Lille, al Valenciennes (4-0), escuadra ubicada en la zona media de la Ligue 1.
Cuestionado al final del encuentro por la presencia del entrenador transalpino, el atacante apostó por la cautela e indicó que aún no se plantea la posibilidad de cambiar de escuadra. «Yo era consciente de que Roberto Mancini estaba allí. El entrenador me lo dijo. Pero yo no estaba pensando en eso, sólo trataba de jugar a mi mejor nivel. Ya veremos más adelante, ahora estoy concentrado en el Lille», indicó Hazard en declaraciones recogidas por Canal +.
Nombrado mejor jugador del torneo galo el curso pasado, Hazard ha mejorado ya los números que le llevaron a obtener ese galardón (acumula 12 goles en 28 partidos), por lo que no sería extraño que decidiese cambiar de club al final de la presente temporada para probar su talento en una liga más potente.
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