El técnico del Manchester City, el catalán Pep Guardiola, se tomó la molestia de viajar hasta tierras lusas para seguir las evoluciones de un futbolista que resulta de su completo agrado, el lateral zurdo Alex Grimaldo.
Entre los miles de aficionados que el pasado lunes se dieron cita en el Estadio da Luz para seguir las evoluciones del choque que medía al Benfica con el Sporting de Braga, el diario Record fue capaz de detectar a un espectador muy especial, el técnico del Manchester City, Pep Guardiola.
Al parecer, el preparador catalán se había tomado la molestia de viajar hasta la capital lisboeta para seguir de primer mano las evoluciones de un futbolista que le resulta especialmente atractivo de cara al próximo mercado invernal, el lateral zurdo Alex Grimaldo.
El carrilero, de apenas 21 años, abandonó la disciplina del FC Barcelona a finales del pasado mes de diciembre, pero ha tenido que esperar hasta el arranque del presente curso para consolidarse definitivamente en los onces iniciales del combinado dirigido por Rui Vitoria (ha disputado todos los minutos de los 7 partidos oficiales que hasta la fecha han disputado los encarnados).
Aunque nadie pone en duda ni el atractivo del técnico de Santpedor ni la capacidad económica de los skyblues, reclutar a este futbolista requerirá de un complicado proceso, ya que si por algo ha destacado el Benfica estos años es por su capacidad para sacar un sensacional partido a cualquier venta. Eso sí, en caso de producirse, el Barça saldría beneficiado. «El FC Barcelona y el SL Benfica han llegado a un acuerdo para el traspaso del jugador Alejandro Grimaldo por un importe de 1,5 M€. El Barça, además, ha informado de que se reserva una participación en una futura venta del jugador que pueda realizar el club portugués», explicó el comunicado emitido en su momento por los azulgranas.
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