Premier League | El sencillo éxito del Sheffield United

Ahora que en las islas comienzan a calar las ideas de dos técnicos con una visión del fútbol tan específica y distinta como Pep Guardiola o Jürgen Klopp, preparadores que, pese a sus diferencias, apuestan por controlar el esférico, sorprende, y mucho, encontrar un equipo que es capaz de sobrevivir a los nuevos tiempos con el viejo estilo de la Premier League.

Y es que, lejos de querer someterse a ese tipo de juego que seguramente ni se adapta a su actual plantilla ni encaja con su tradición, el Sheffield United ha decidido mantenerse fiel a sus genes y competir en la máxima categoría del fútbol inglés con los mismos valores que hace unos meses propiciaron su ascenso: la combatividad y el fútbol directo.

Los blades han aceptado con naturalidad que, cuando no se tienen asimilados ciertos automatismos, el balón puede quemar, y por eso,en cuanto éste acaba en sus pies, tratan de hacerlo llegar lo más rápido posible a posiciones ofensivas. Allí, sus puntas pelean la pelota con ahínco e intentan generar situaciones de peligro en el menor tiempo posible. Este mecanismo tan simple ya ha pillado por sorpresa a más de un equipo y ha permitido que, a día de hoy, el equipo dirigido por Chris Wilder ocupe el sexto lugar de la tabla.

Además de por ser un equipo que no se anda con demasiadas exquisiteces a la hora de avanzar hacia el área rival, los de Bramall Lane han destacado también por su excelente trabajo defensivo. De hecho, gracias al gran desempeño de la pareja conformada por los centrales John Egan y Jack O’Conell y al esfuerzo colectivo del resto de la escuadra, los red and white wizards son, junto al Leicester City, el equipo menos goleado de la competición (han encajado apenas 8 goles en 11 jornadas).

Ya que su forma de entender el fútbol requiere de un gran despliegue físico, el equipo suele experimentar un bajón a partir del minuto 65-70 de cada partido. Cuando el sudor se acumula en la frente de los jugadores, su efectividad ofensiva sufre un importante bajón y se abren fisuras en su muro defensivo. Pese a ello, hasta ahora solo Leicester City, Southampton y Liverpool han conseguido derrotarles; el resto de rivales, entre los que figuran Arsenal, West Ham o Everton, no han podido superar a un rival que ha sabido hacer de la sencillez virtud.