Tottenham: El imparable descenso a los infiernos de Mauricio Pochettino

Por Juan C. Navarro
2 min.
Mauricio Pochettino quiere hacer tropezar al Manchester City @Maxppp

Elogiado por su sensacional labor al frente del Southampton, Mauricio Pochettino vive en el Tottenham la otra cara del fútbol. El técnico argentino no ha logrado aún imponer su estilo de juego y en White Hart Lane ya hay aficionados que piden a gritos su destitución.

En el fútbol, la distancia que separa el éxito del fracaso es casi inapreciable. Basta con que se acumulen un puñado de resultados negativos para que el héroe se convierta en el peor de los villanos. Que se lo pregunten, por ejemplo, a Mauricio Pochettino.

Sigue después de este anuncio

El técnico argentino fue reclutado por el Tottenham el pasado verano tras labrarse una merecida fama con el Southampton y ser tanteado por multitud de escuadras del continente, pero tras apenas dos meses de temporada ya hay un nutrido grupo de aficionados que han comenzado a pedir su cabeza. «Pochettino out» se escuchaba el pasado fin de semana en White Hart Lane, tras la derrota ante el Newcastle (1-2).

Leer El Atlético de Madrid tiene nuevo rival por Alessandro Buongiorno

El rápido descenso a los infiernos del ex del Espanyol tiene mucho que ver con las dificultades para implantar su sistema de juego basado en el toque y la asociación. Los spurs quieren dominar la posesión, pero ni sus rivales ni, en ocasiones, el tipo de campo que suele predominar en la Premier League facilitan esta labor. «Nuestro estilo implica que necesitamos un espacio más grande para jugar porque jugamos un juego posicional. Es cierto que el White Hart Lane es un poco apretado y es mejor para el oponente cuando juega en largo (...). Necesitamos tiempo para adaptarnos a nuestra nueva forma de jugar y para entender mejor nuestra posición en el terreno de juego», explicó el propio entrenador en su última rueda de prensa.

Sigue después de este anuncio

Esta incapacidad para adaptarse al nuevo estilo ha provocado que sus delanteros vivan bastante alejados de la portería rival (Emmanuel Adebayor acumula 2 goles y Roberto Soldado aún no se ha estrenado en Premier) y que sus defensas cometan más errores de los esperados (han recibido 13 goles en 9 jornadas), dos circunstancias que han abocado al Tottenham a vivir en el puesto once de la tabla, a ya más de diez puntos de distancia del líder de la competición, el Chelsea.

Tal vez, la razón que explica por qué una música que sonaba celestial en el Southampton resulta insoportable para los aficionados de los spurs haya que buscarla en los encargados de interpretar la sinfonía. Sin Adam Lallana, Morgan Schneiderlin, Luke Shaw, Jack Cork o Jay Rodríguez, Pochettino tiene que apañárselas con jugadores mucho más acostumbrados al juego directo que, como bien dice, necesitan tiempo para cambiar el chip... Pero tiempo es justo lo que falta en el fútbol.

Sigue después de este anuncio

Noticias

Sigue después de este anuncio