El que fuera su primer equipo profesional, el Everton, se plantea seriamente la posibilidad de lanzar sus redes sobre Wayne Rooney, futbolista cuya continudidad en el Manchester United no parece ni mucho menos garantizada.
«Me quedo en el Manchester United». Ayer mismo, Wayne Rooney (31 años) ponía fin a los incesantes rumores que se empeñaban en situarle a un paso del fútbol chino y garantizaba su permanencia en Old Trafford hasta, como mínimo, el término de la presente temporada.
Aunque los clubes de la emergente liga asiática estaban dispuestos a cubrirle de oro, el delantero ha optado por permanecer fiel al club que le ha catapultado a la fama, una decisión sin duda complicada tomar por el hecho de que su rol en los actuales planteamientos del técnico de los diablos rojos, el luso José Mourinho, es francamente secundario (sólo ha sido titular en 8 partidos de Premier League esta temporada).
Salvo que la situación experimente un vuelco en los próximos meses, parece claro que el delantero tendrá que volver a replantearse su situación en verano. Entonces, además de los conjuntos chinos, otro equipo volverá a entrar en juego, el Everton. Los toffees ya tantearon su fichaje en enero y parecen dispuestos a volver a la carga en cuanto concluya la temporada.
Lógicamente, los de Goodison Park tratarán de jugar la baza sentimental y apelaran al origen del punta (nacido en Liverpool) y al hecho que fue la suya la primera elástica que vistió el internacional inglés (67 partidos de liga, 15 goles). «United y Everton son los únicos clubes en los que he jugado como jugador de fútbol profesional. Estoy feliz de decir ahora que, suceda lo que suceda en el futuro, no voy a jugar para otro club de la Premier League», reconoció recientemente el ariete. ¿Regresará a sus orígenes?
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