Aunque el ya ex presidente catalán puede presumir de un currículum cargado de éxitos, su mandato deja también varios fichajes de dudoso rendimiento que ahora deberá gestionar la nueva directiva.
Al margen de cerrar los posibles fichajes (Cesc Fábregas, Juan Mata o, incluso, Fernando Torres), el nuevo presidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, tendrá que gestionar la situación de 4 futbolistas que fueron contratados por el equipo del antiguo mandatario de la entidad, Joan Laporta.
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Para empezar, el club deberá buscar acomodo a Alexander Hleb, extremo que jugó cedido en el VfB Stuttgart el pasado curso y que no entra en los planes de Pep Guardiola. Italia parece su destino más probable, aunque el Barça negociará con firmeza para tratar de recuperar los 15 M€ que invirtió en su fichaje.
También podría acabar en el Calcio el uruguayo Martín Cáceres. El central parecía haberse ganado la confianza de la Juventus, pero una lesión en la recta final de la temporada y la diferencia entre lo que ofrece la Vecchia Signora (10 M€) y lo que pide el Barça (pagó 16 M€ por su fichaje) han dado pie a otras opciones (ver artículo).
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Finalmente, los directivos culés tendrán que encontrar nuevo destino para los brasileños Keirrison y Henrique. El delantero se mueve entre Italia y Brasil y el defensa espera renovar su préstamo en el Racing de Santander.
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