El delantero español puede certificar su regreso a Italia, donde los rossoneros quieren abarcar la oportunidad que ofrece la disposición a la venta del futbolista por parte del Chelsea, quien se muestra desencantado con el rendimiento del jugador.
El conjunto rossonero busca alternativas que den paso a una nueva fórmula en la delantera. Nikola Kalinic y André Silva son los dos grandes nombres que ha colocado el club en el mercado tan solo un año después de sus incorporaciones, donde elAC Milan ya otea el perfil que busca como su próximo '9'.
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Según ha publicado Calciomercato, la presencia de Guiseppe Bozzo en la ciudad italiana podría significar una apertura de negociaciones entre el agente y el club por uno de sus representados. En concreto, este sería el caso de Álvaro Morata, cuyo paso por Londres le ha dejado muy tocado y el Chelsea, quien realizó una elevada apuesta económica por el ariete, tendría la intención de desprenderse de él siempre que supongo una cura económica para sus cuentas.
Morata cuenta con experiencia en la Serie A, donde tuvo una etapa exitosa como miembro de la plantilla de la Juventus de Turín, en una competición en la que se encontró cómodo y en disposición de triunfar. La oportunidad de regresar a Italia no desencantaría al futbolista, que esperaría que avanzaran los contactos con su agente para valorar la propuesta milanista.
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A expensas de la decisión de la UEFA
La actuación de la UEFA puede privar al AC Milan de su participación en la Europa League. La última novedad al respecto, es la decisión del órgano europeo en declinar el acuerdo de asentamiento, lo que implica rechazar los parámetros del Fair Play Financiero que los rossoneros ofrecían en sus cuentas. De esta manera, el club se arriesga a perder su presencia en la competición y, como añadido, a ser castigado sin poder actuar en el mercado, lo que limitaría la capacidad de acción y de preparación del bloque para la próxima temporada, dejándole sin la oportunidad de tantear el futuro del delantero español.
La resolución definitiva, esperada para mediados de junio, marcará la conducta del AC Milan, quien se mantendrá a la expectativa de que la decisión por parte de la UEFA que no repercuta en el ámbito deportivo. Tanto en entradas como en salidas, el equipo se encuentra atado de menos, por lo que es muy probable que retrase toda su planificación deportiva hasta concretar la situación tanto financiera como deportiva,
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