El cuadro nerazzurro no logró cerrar esta incorporación antes de que terminara el mercado y la deja en el aire hasta que comience 2017.
El Inter de Milán viene de completar un magnífico mercado estival de fichajes, con 95,5 M€ invertidos en varias incorporaciones de renombre. Un gran desembolso que se une al cambio en el banquillo vivido en el ecuador del mes de agosto, que acabó con la llegada de Frank De Boer.
El cuadro nerazzurro quiere reverdecer viejos laureles y por ello ha apostado por esta revolución en su plantilla, que sin embargo se ha quedado algo corta. Porque según afirman diferentes medios en Italia, el combinado lombardo ha echado en falta el fichaje de un nuevo central.
De hecho medios como IlSussidiario ya explican que los italianos se lanzarán a por un nuevo zaguero en enero, y tienen para ello dos objetivos. Dos nombres que estaban en la agenda pero que por diferentes motivos no pudieron llegar finalmente al Giuseppe Meazza.
El primero es Domenico Criscito, italiano de 29 años del Zenit de San Petersburgo, que podría llegar por unos 12 M€. También interesa Victor Lindelöff, sueco de 22 años del Benfica que fue seguido atentamente por escuadras como el Chelsea este verano.
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