La evidente decepción del AC Milan

Este parecía ser al fin el año del AC Milan. Fue el último club en ganar el Scudetto allá por 2011, antes de que comenzara la tiranía aún vigente de la Juventus de Turín. Precisamente aquel equipo era entrenado por Massimiliano Allegri y sus estrellas eran Zlatan Ibrahimovic y Thiago Silva. Sus fugas al año siguiente fueron sin duda el simbólico cambio de ciclo en un club que desde entonces se ha arrastrado por el pesimismo y las decepciones.

Pero hace pocos meses, la llegada de nuevo capital procedente de China cambió las cosas. Lo vimos este verano, cuando la política de fichajes de la entidad dio un giro radical. Cerca de 200 M€ invertidos en fichajes de renombre, como Leonardo Bonucci, André Silva, Andrea Conti, Hakan Calhanoglu, Ricardo Rodríguez, Mateo Musacchio, Franck Kessié, Lucas Biglia o Nikola Kalinic. Sin olvidar la renovación de Gianluigi Donnarumma.

Un equipo nuevo capaz de poder plantar cara sobre el papel a la vecchia signora. Pero si algo es imprevisible es el fútbol. Porque después de 7 jornadas de Serie A el conjunto de San Siro no carbura: ha sumado 12 puntos de 21 posibles, está lejos del Nápoles que es el líder con 21 puntos y muchos de sus fichajes han decepcionado, como Bonucci o el propio Kessié. Además perdió a Conti para una temporada por una importante lesión.

A esto se suman las críticas a un cuestionado Vincenzo Montella, a quien se acusa de no saber llevar las riendas de la situación. De hecho ya se ha rumoreado con el fichaje de algún otro entrenador para que ocupe su lugar…