Eurocopa | Inglaterra liquida a su bestia negra y mantiene vivo su sueño

Era este sin duda alguna uno de los grandes enfrentamientos que nos deparaban los cuartos de final. Dos de las favoritas frente a frente. Inglaterra recibiendo a Alemania en un Wembley prácticamente lleno, con gran ambiente toda la tarde en la previa del partido y ganas de ver a estas potentes selecciones. Comenzaban además sus técnicos con algunos cambios en los onces y desde el principio vimos un partido de un ritmo alto, con ocasiones para los dos contendientes pero sin goles en una primera parte plena eso sí de oportunidades de gol y alguna polémica.

Empezaron mejor los germanos, dominando la pelota y gozando de las primeras opciones. De hecho en el 8' Leon Goretzka, se quedaba solo ante Pickford cuando fue derribado por Rice en la frontal y se ganó la amarilla mientras los jugadores de la Mannschaft protestaban una roja. A partir de esa opción que Havertz desperdiciaba en la falta, los pross comenzaron a crecerse para fervor de su público. En el 16'era Raheem Sterling quien obligaba a una gran parada a Manuel Neuer, preludio de unos claros minutos de dominio local, también infructuosos, con varios saques de esquina al limbo. Harry Maguire perdonaba de cabeza en el 27'. Hasta que en los últimos minutos el juego estuvo más equilibrado.

Jordan Pickford salvaba a los ingleses con una gran parada a Timo Werner en el 33', pero también Harry Kane la tuvo en el descuento cuando Mats Hummels se lanzaba a la heroica para evitar el primer tanto antes del descanso. Así que estábamos ante un duelo sumamente igualado, con dos equipos plagados de estrellas pero no llegaban los goles. Un partido de alta tensión y ritmo vertiginoso que nos auguraba una emocionante segunda parte.

Sterling y Kane dan los golpes decisivos

Nada más arrancar el segundo acto, llegaba otro paradón de Jordan Pickford en el 48', en este caso a disparo de Kai Havertz, que fue de nuevo el preludio de dominio alemán en los primeros instantes del segundo tiempo. Los de Joachim Löw lograban embotellar a los británicos en su área pero sin acierto. Mientras Harry Kane era una isla en ataque sin recibir apenas balones. En una de las ocasiones en las que Inglaterra logró estirarse se llevaba un golpe el delantero del Tottenham, pero poco más. Y eso que conforme pasaban los minutos los germanos cedían algo de terreno.

Llegó entonces el carrusel de cambios, desconcierto en el partido también que en esos momentos no tenía dueño. Por eso en el 75' Raheem Sterling, el mejor de Inglaterra en esta Eurocopa, se inventaba una pared por el centro del ataque con Harry Kane, abría el balón a la izquierda donde Luke Shaw al fin asomaba en ataque, y le servía un centro raso al propio delantero del Manchester City para desnivelar el choque. Un gol solitario en medio de un segundo tiempo en el que apenas pasaba nada, pero los pross lograban sacar petróleo de esa jugada.

Pero Alemania siempre tiene algo que decir. Evidentemente pasó a dominar el partido en busca del empate, que Thomas Müller tuvo claro en el 80 al plantarse solo delante de Pickford, tras haber arriesgado Sterling en un fallo claro. El atacante del Bayern Múnich mandaba la pelota fuera. Pero también se arriesgaban los germanos a encajar otro al volcarse en ataque, y es lo que sucedió en una contra inglesa, en la que Jack Grealish ponía un centro exquisito desde la izquierda para que al fin Harry Kane se estrenara en la Eurocopa en el 86'.

🏴󠁧󠁢󠁥󠁮󠁧󠁿 Raheem Sterling has now scored 15 goals in his last 20 matches for England ⚽️#EURO2020 pic.twitter.com/nJFxk8V3TE

— UEFA EURO 2020 (@EURO2020) June 29, 2021