El incuestionable futuro de Diego Simeone

"Buscaremos soluciones si estamos el año que viene. El fútbol es muy cambiante, pero hay que estar abierto a todas las posibilidades. Hay que estar abierto a lo que el club decida". Tras la sorprendente derrota copera ante el Cornellá, el técnico Diego Simeone compareció ante los medios y puso en duda su continuidad al frente del Atlético de Madrid.

Con el paso de los días, ha quedado claro que aquellas manifestaciones no fueron más que una cortina de humo, una forma de desviar la atención y minimizar el impacto de un marcador adverso. "Es normal que cada uno interprete lo que considere. Ya dije en la rueda de prensa que yo estoy muy feliz en el Atlético de Madrid, que venimos de un año de transición y que estamos haciendo una temporada muy buena en una competición difícil como la Liga. Cada uno es libre de pensar lo que prefiera, está claro que alguno siempre tiene esa malicia esperada, pero con tranquilidad la seguimos sosteniendo", puntualizó días después.

Absoluta sintonía entre las partes

A día de hoy, más que en separar sus caminos, en lo que están pensando tanto la directiva rojiblanca como el preparador es en ampliar su vínculo más allá de 2022. De hecho, una información que hoy podemos leer en el diario As asegura que ya se han producido las primeras reuniones entre el consejero delegado de la entidad, Miguel Ángel Gil, y el Cholo.

En principio, ambas partes parecen dispuestas a estirar su relación hasta como mínimo 2024. La entidad nunca ha perdido su confianza en el trabajo del argentino y el entrenador cree que su etapa en la capital de España aún está lejos de poder darse por concluida. Económicamente, tampoco debería haber problema. Simeone es el técnico mejor pagado del mundo (se habla de 32 M€ netos) y, dadas las actuales circunstancias de crisis, no parece que vaya a supeditar su continuidad a un aumento.