El Bayer Leverkusen superó al Rangers en un partido intenso y con escaso brillo en el que lo más destacable fueron los goles y, en especial, el sensacional ambiente que pudo respirarse en Ibrox Park, uno de los pocos estadios que hoy pudo contar con público en las gradas. Por su parte, el Shakhtar Donetsk obtuvo una importante victoria a domicilio ante el Wolfsburgo.
— Rangers Football Club (@RangersFC) March 12, 2020
Merece la pena dedicar unos instantes a observar el vídeo que encabeza esta breve crónica. En apenas unos días, la UEFA decretará la suspensión de la Champions League y la Europa League y esas imágenes, las de un estadio entregado a un equipo, quedarán en pausa durante un periodo de tiempo indefinido. El destino, que en ocasiones hasta puede ser benévolo, quiso que uno de los últimos partidos oficiales que se verán en una temporada se disputase en un campo mítico, en uno de esos lugares en los que el fútbol se respira, se oye y se siente. Ibrox Park (ahora Ibrox Stadium) respondió sobradamente a las expectativas y brindó unos prolegómenos de esos que logran casi poner los pelos de punta.
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El devenir del partido fue otra historia. Aunque Rangers y Bayer Leverkusen mostraron una actitud más que correcta y se esforzaron por buscar el área rival, el encuentro no fue ni brillante ni divertido. De hecho, el marcador se desniveló antes del descanso por una acción casi fortuita en la que el colegiado interpretó como penalti un centro de Karim Bellarabi que golpeó ligeramente la mano del zaguero George Edmundson. El talentoso Kai Havertz transformó la pena máxima (37') y permitió a los germanos marcharse al vestuario con una pequeña ventaja.
Tras la pertinente arenga de Steven Gerrard, el cuadro escocés regresó al terreno de juego dispuesto a quemar sus naves en busca de, como mínimo, un empate. Los visitantes, que seguramente se esperaban esta reacción, no se pusieron nerviosos y optaron por retroceder unos metros y esperar con calma la oportunidad de lanzarse al ataque en pos del gol que sentenciase el partido y dejase la eliminatoria encarrilada. Su táctica resultó acertada, ya que, en una de sus incursiones ofensivas, Charles Aránguiz cazó un balón suelto en la frontal y con un certero disparó subió el 0-2 al marcador.
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Lejos de derrumbarse, el Rangers encajó este segundo golpe con enorme dignidad. De hecho, tras levantarse de la lona, apostó por dar un nuevo paso al frente. Aunque su juego nunca llegó a ser muy fluido, el equipo encontró premio en una acción a balón parado en la que Edmundson se elevó magistral para cabecear un balón lejos del alcance de Lukas Hradecky (minuto 75). Tras esta diana, llegó a parecer que el conjunto de las islas tenía el empate a tiro, pero lo cierto es que cuando el partido entraba en su fase más caliente, Leon Bailey acabó con sus esperanzas y firmó un 1-3 que deja la eliminatoria casi vista para sentencia.
El Shakhtar Donetsk cobra una importante ventaja ante el Wolfsburgo, Olympiakos y Wolverhampton firman tablas
Del resto de choques que completaban este segundo turno de encuentros destacamos la victoria del Shakhtar Donetsk en el campo del Wolfsburgo (1-2). Aunque John Brooks logró igualar el marcador tras el descanso (48') y reducir el valor del tanto sumado por Júnior Moraes en el 17, fue otro de los brasileños del cuadro ucraniano, Marcos Antônio, quien en el 73' acabó dando la victoria a los suyos. Por su parte, el choque entre Olympiakos y Wolverhampton finalizó con un empate a uno que otorga una pequeña ventaja a las tropas de Nuno Espirito Santo. El marroquí Youssef El Arabi adelantó a los locales en el 54' y el portugués Pedro Neto fue el encargado de sellar las tablas en el 67.
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