Pese a que ha sido muy superior a su adversario, especialmente durante los primeros 45 minutos, el cuadro de Diego Simeone ha sufrido de lo lindo para sumar los tres puntos. Una victoria que llegaría con una diana de Álvaro Morata sobre la bocina (corroborada por el VAR).
Nuevo desafío para el Atlético de Madrid en lo que se refiere al calendario de una Liga donde el FC Barcelona desea dominar a costa del Real Madrid. Siguiendo con el cuadro rojiblanco, confiaba en mantener la estupenda versión que está desplegando desde la reanudación de la competición (tras el Mundial 2022). En esta ocasión (lunes 13 de marzo), se desplazaba hasta territorio catalán para poner a prueba a un Girona que suspira por la permanencia.
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Míchel Sánchez se decantaría de entrada por un Paulo Gazzaniga que se ha convertido, con méritos propios, en el titán bajo palos de los suyos durante este curso. Por delante, Arnau Martínez, cortejado por su rival de esta noche, quedaría acompañado en la retaguardia por Santiago Bueno, David López y Miguel Gutiérrez. Oriol Romeu aportaría el equilibrio, dando muchos espacios a Viktor Tsygankov, Borja García, Aleix García y Rodrigo Riquelme. En punta de lanza, Taty Castellanos.
Por su parte, la disposición táctica de Diego Pablo Simeone contaría con el imperial Jan Oblak como el guardián de sus dominios. El esloveno, uno de los mejores arqueros del mundo, quedaría resguardado por un sistema de tres centrales con Stefan Savic, José María Giménez y Mario Hermoso. La profundidad en los carriles sería para Nahuel Molina y Yannick Carrasco, junto con la creación de Koke Resurrección, Marcos Llorente y Thomas Lemar. En ataque, la dupla de Memphis Depay y Antoine Griezmann.
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Álvaro Morata acude al rescate del Atlético de Madrid
Los colchoneros llevarían a cabo un monólogo prácticamente desde el pitido inicial del trencilla en Montilivi. El combinado catalán reclamaría una pena máxima (lo era por mano), pero no sería decretada por posición antirreglamentaria del Taty. Con el transcurso de los minutos, Carrasco comenzaba a hacer de las suyas por el flanco izquierdo. Riquelme, cedido por el Atleti, intentaba convertirse en un quebradero de cabeza para Molina.
El equipo del Cholo llevaba la iniciativa, pero podía sufrir con las rápidas transiciones de los locales al contragolpe. Memphis dispondría de dos oportunidades bastante claras, pero (sorprendentemente) no estaría certero de cara a puerta. Griezmann era (una vez más) el factor diferencial de los madrileños, al tiempo que Llorente evidenciaba su increíble despliegue físico. Gazzaniga frenaría a Carrasco, a lo que hay que añadir una doble intervención muy meritoria para resignación de Marcos.
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Ya en la segunda mitad, el colegiado acudiría al VAR para revisar una posible pena máxima para los de Simeone. El penalti existía por mano de Oriol Romeu, pero pitaría falta previa. En cuanto al míster argentino, agitaría el árbol con un triple cambio con el firme propósito de sumar tres puntos vitales en la carrera por estar en la Champions 2023-2024. Oblak estaría inconmensurable para evitar una diana de muy bella factura de David López, pero la acción decisiva (VAR mediante) sería el gol de Álvaro Morata (0 – 1). Una diana que acabaría sellando el sufrido triunfo del Atleti a costa del Girona.
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