Notable tempestad la que se viene viviendo en el seno del Valencia durante las últimas semanas. Huérfano de buenos resultados, y despojado de su segundo técnico (Albert Celades), el cuadro che se encuentra en un momento de incertidumbre. Y esto, evidentemente, se nota sobre el césped. Así, el equipo de Mestalla recibía hoy en Mestalla al colista Espanyol con la esperanza de una victoria que –unida a una serie de carambolas- le permitiera seguir soñando con la disputa de la Europa League.
Después de unos días en los que se ha especulado con distintos nombres propios para el banquillo, una lista de negra con varios jugadores a los que se ha comunicado que no seguirán, y un posible acuerdo entre Ferran Torres y el Manchester City, los de Voro se veían las caras con el Espanyol. Primer equipo descendido a Segunda División, y preparando su temporada en la categoría de plata, los de la ciudad condal apenas habían sumado cinco victorias en todo en curso.
En un partido soso y sin demasiadas oportunidades, el tanto de Kevin Gameiro da al Valencia una gris victoria que le permite escalar en la clasificación y seguir aspirando a la clasificación para la Europa League. Habrá que esperar, sin embargo, a la última jornada.
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