Liga | El Real Madrid vence al FC Barcelona y duerme como líder

Por Pedro Parra
5 min.
Karim Benzema celebra su diana en el 'Clásico' @Maxppp

Karim Benzema (con una genialidad) y Toni Kroos sitúan a los de Zinedine Zidane en lo más alto de la tabla de manera provisional. Óscar Mingueza le daría una vida extra al equipo de Ronald Koeman, pero sería insuficiente para sumar algo positivo en la capital de España.

Lucha de poder a poder, al menos sobre el papel, con motivo del que siempre ha sido considerado como el partido del siglo. Real Madrid y FC Barcelona se daban cita en la capital de nuestro país, un duelo correspondiente a la 30ª jornada de Primera División. Un Clásico del que, sin duda, estaría bastante pendiente un Atlético de Madrid que sufrirá la tremenda ausencia de Luis Suárez a lo largo de las próximas semanas.

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Lionel Messi podía presumir de alcanzar a Sergio Ramos como los dos futbolistas con más participaciones en la historia del Clásico (un total de 45 partidos). Zinedine Zidane, míster merengue, se había decantado de inicio por Fede Valverde en detrimento de Marco Asensio, todo ello con la intención de darle mayor consistencia a la medular. En lo que hace alusión al sistema de Ronald Koeman, optaría por un esquema de tres centrales y dos carrileros abiertos, siendo Antoine Griezmann el perjudicado por tener que arrancar en el banquillo.

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Valverde se estaba convirtiendo en la sombra de Jordi Alba, mientras que Casemiro volvía a demostrar su importancia para sostener los cimientos del Real Madrid en el centro del campo, además de darle oxígeno a su entramado defensivo. El Barça pretendía llevar la manija del partido a través de la posesión del esférico, aunque serían los locales los que golpearían en primera instancia con una exquisitez de Karim Benzema (1 – 0). Un ariete galo, de los más destacados del planeta, que realizaría un recurso técnico precioso.

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El Real Madrid tira de pegada

De esta manera, Benzema sumaba su diana número 19 en Primera División, al tiempo que rompía la sequía de nueve duelos contra el FC Barcelona sin ver portería. El choque estaba realmente precioso, con el añadido de un aguacero en Valdebebas a causa de la tremenda tormenta que estaba arreciendo en Madrid. Uno de los más activos sobre el tapete verde estaba siendo Vinícius, quien venía de vivir su mejor noche con la zamarra merengue el pasado martes 6 de abril frente al Liverpool.

El diamante en bruto brasileño se estaba convirtiendo en una pesadilla para Óscar Mingueza, al que desbordaba y superaba continuamente por velocidad. En una de esas acciones, provocaría una falta en la frontal del área que, con algo de fortuna al rebotar en Sergiño Dest, sería enviada por Toni Kroos al fondo de las mallas de la portería custodiada por Marc-André ter Stegen (2 – 0). La sentencia pudo llegar casi de inmediato, pero entre la madera y el arquero alemán frenaron a un Real Madrid que estaba siendo un auténtico ciclón.

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La única noticia negativa de la primera mitad para los de Zidane llegaría con motivo de la lesión de Lucas Vázquez, un hombre que había sufrido un encontronazo en la rodilla. Por tanto, Álvaro Odrizola ocuparía su parcela en el césped, al tiempo que Lionel Messi, jugando con el factor del viento, se quedaría a las puertas de materializar un gol olímpico. Con Courtois batido, el Real Madrid respiraría aliviado al ver que la pelota sería repelida por la madera. Asimismo, el internacional con Bélgica le ganaría la partida al seis veces ganador del Balón de Oro.

Mingueza le da vida al FC Barcelona

Con vistas a la segunda mitad, Koeman daría entrada a Antoine Griezmann por un Dest que no había tenido su actuación más brillante desde que aterrizó en el FC Barcelona. El Real Madrid, como es evidente, seguía buscando su oportunidad para asestarle a su eterno rival un nuevo mazazo al contragolpe. En cuanto a los culés, se reengancharían a la batalla a la hora de partido por medio de su canterano Óscar Mingueza (2 – 1). Acto seguido, Zidane optaría por Marco Asensio para reemplazar a Fede Valverde.

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Después de una conexión entre Ferland Mendy y Vinícius, Araujo estaría a punto de introducir el cuero en propia portería, pero se vería salvado por el palo. Vinícius le daría un caramelito a Kroos, aunque el 8 de los blancos no lograría atinar con su definición. Mingueza volvería a sumarse a labores ofensivas con un interesante centro-chut, mientras que los dos entrenadores seguirían tirando de fondo de armario. Zidane apostaría por Mariano Díaz, Marcelo e Isco Alarcón por Benzema, Vinícius y Kroos, al tiempo que Koeman confiaría en Sergi Roberto e Ilaix Moriba por Sergio Busquets y Araujo.

En las postrimerías del envite, los catalanes quemarían sus cartuchos con Martin Braithwaite y Francisco Trincao, prescindiendo de Ousmane Dembélé y Pedri González, quienes no tuvieron su noche más productiva. A continuación, Jordi Alba se beneficiaría de un desajuste defensivo de Odriozola para tratar de conectar con Braithwaite, un delantero que sería derribado por Mendy. Aun así, el trencilla consideró que la acción no sería punible, por lo que no decretaría la pena máxima. El Real Madrid acabaría en inferioridad numérica por la expulsión de Casemiro (por doble cartulina amarilla), pero sellaría la victoria para situarse como el líder de nuestra Liga. Todo ello, dicho sea de paso, a la espera del duelo del Atlético de Madrid en el feudo del Real Betis. El Barça tendría el empate en las botas de Ilaix , pero su chut se toparía con el larguero.

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