Chelsea y Crystal Palace iban a jugarse el segundo billete para la gran final de la FA Cup en el mítico Estadio de Wembley. Una cita en la que ya aguarda el Liverpool, dado que los hombres de Jürgen Klopp fueron capaces de doblegar al Manchester City. Como es evidente, los Blues querían resarcirse después de quedarse a las puertas de una épica remontada ante el Real Madrid en los cuartos de final de la Champions. Por su parte, sus vecinos de Londres pretendían dar la sorpresa de la jornada.
César Azpilicueta dispondría de una gran ocasión para aventajar a los de Thomas Tuchel, aunque no estaría precisamente certero con su definición. Pese a ello, el Palace no le perdía la cara al compromiso. Timo Werner estaría a punto de ver portería al volver del túnel de vestuarios, al tiempo que Cheikhou Kouyaté perdonaría con su testarazo a la salida de un córner. El que no fallaría sería Ruben Loftus-Cheek (1 – 0), al igual que Mason Mount para impulsar al Chelsea a la pelea por la corona de la FA Cup (2 – 0).
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