Se complica para Brahim Díaz
Brahim Díaz no ha tenido la importancia esperada en los primeros partidos de Xabi Alonso al frente del Real Madrid, situación que se podría complicar incluso más con la llegada de Franco Mastantuono.

El Real Madrid vive un momento de transición bajo la dirección de Xabi Alonso, quien asumió el banquillo justo antes del Mundial de Clubes. Su llegada ha traído consigo cambios significativos en la dinámica del equipo, pero también retos importantes. La contundente derrota por 4-0 ante el Paris Saint-Germain en las semifinales del torneo evidenció ciertas carencias, agravadas por la ausencia de Kylian Mbappé, quien estuvo enfermo durante gran parte de la competición. En este contexto, Alonso ha comenzado a definir su proyecto, apostando por nuevos talentos para consolidar su idea de juego.
Entre las decisiones del técnico vasco destaca la importancia de jugadores como Dean Huijsen y Arda Güler, quienes han ganado protagonismo y la confianza del entrenador. Además, la incorporación de Gonzalo García refleja la intención de Alonso de construir un equipo con una mezcla de juventud y experiencia. Sin embargo, estas elecciones han relegado a otros futbolistas a un segundo plano, siendo Brahim Díaz uno de los más afectados. El internacional marroquí, que bajo las órdenes de Carlo Ancelotti era un recambio habitual, ha visto reducido drásticamente su tiempo de juego desde la llegada del nuevo técnico.
Los números de Brahim Díaz bajo la dirección de Alonso son reveladores: apenas 45 minutos disputados contra Pachuca en la fase de grupos del Mundial de Clubes, 26 minutos frente a Al-Hilal y PSG, y tan solo 9 minutos contra el RB Salzburgo. En los encuentros ante Juventus y Dortmund, el atacante de 25 años ni siquiera saltó al terreno de juego. Este cambio de estatus contrasta con su rol bajo Ancelotti, quien confiaba en él como una pieza clave en la rotación del equipo. La falta de minutos ha generado dudas sobre el encaje de Díaz en los planes de Alonso.
Papel secundario
El nuevo entrenador del Real Madrid parece tener otras prioridades, como la llegada de Franco Mastantuono, por quien el club ha desembolsado una cantidad significativa de dinero. Además, la apuesta por Arda Güler como una de las promesas del equipo ha desplazado a Brahim en la jerarquía del vestuario. Según el diario ‘AS’, Alonso está redefiniendo las dinámicas del equipo, lo que ha dejado al marroquí en una posición complicada, aunque su futuro en el club no está en entredicho. Díaz, consciente de los retos, mantiene su compromiso con el Real Madrid y su deseo de triunfar en el Santiago Bernabéu.
A finales de junio, Brahim expresó su determinación: «Hoy tenemos un entrenador excepcional que conoce perfectamente el club y sabe lo que espera de nosotros. Siempre he tenido la ambición de triunfar aquí, es mi objetivo desde el principio». Estas palabras reflejan su intención de quedarse y luchar por un puesto, a pesar de las dificultades. Su renovación con el club está prácticamente asegurada, lo que le otorga una oportunidad para revertir la situación en la próxima temporada. Además, el posible traspaso de Rodrygo podría abrirle un hueco en el once titular, dándole una nueva oportunidad para brillar.
El caso de Brahim Díaz pone de manifiesto los retos que supone un cambio de entrenador en un club de la exigencia del Real Madrid. Mientras Xabi Alonso trabaja en consolidar su proyecto, jugadores como Díaz deberán demostrar su valía en un contexto competitivo. No cabe duda que todavía queda un largo camino por recorrer para el ex del Manchester City que el curso pasado sumó 2289 minutos sobre el césped que se tradujeron en 56 partidos oficiales (6 goles, 8 asistencias).
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