La directiva del Tottenham pretende aprovechar el inminente mercado invernal para dar salida a un buen número de futbolistas que no gozan con la plena confianza de Mauricio Pochettino. Con su marcha, los spurs confían en recaudar una importante cantidad de dinero.
En este momento, los principales temas de discusión entre los seguidores del Tottenham están relacionados con el futuro del entrenador Mauricio Pochettino, cuyo nombre sigue siendo vinculado con Real Madrid y Manchester United, y de su director de orquesta, el danés Christian Eriksen. Sin embargo, en las oficinas del club hay otras preocupaciones de carácter más inmediato.
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Según cuenta el Daily Mail, aunque no tienen previsto cerrar ningún fichaje, los dirigentes sí quieren aprovechar el mercado de invierno para dar salida a todos aquellos futbolistas que, por unos motivos u otros, no terminan de jugar un papel determinante en el actual proyecto deportivo.
Entre quienes cuentan con más opciones de enfilar la puerta de salida figura Moussa Dembélé (31 años), centrocampista que acaba contrato en junio y que cuenta con ofertas de AS Mónaco e Inter del Milán. Al igual que el belga, también han sido situados en el escaparate los veteranos Fernando Llorente (33) y Michel Vorm (35), futbolistas que quedarán libres en verano y que, en caso de salir en enero, aún podría dejar algún euro en las arcas.
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Para completar una operación salida con la que, de acuerdo a la misma fuente, pretenden recaudar unos 82 M€, los spurs han colgado igualmente el cartel de transferibles al centrocampista keniata Victor Wanyama (27 años) y al extremo galo Georges-Kévin Nkoudou (23)
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