El excelente rendimiento del atacante francés ubicado como tercer centrocampista en el combinado de Didier Deschamps, abre ahora muchas soluciones a Diego Simeone. Y confirma por otro lado que el galo vuelve a su mejor nivel.
Antoine Griezmann fue uno de los jugadores más destacados sin duda en el Mundial de Catar que finalizaba con la selección de Francia como subcampeona. No pudo reeditar el título la selección de Didier Deschamps finalmente como en Rusia, donde el jugador del Atlético de Madrid acababa siendo uno de los jugadores diferenciales y más destacados.
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En este torneo, fue ubicado como sabemos por su entrenador en la mediapunta, donde guiaba el juego de ataque de los suyos y añadía un gran trabajo defensivo que ya lo acostumbramos a ver en el Atlético de Madrid. De hecho esta disposición táctica provocó que en muchas ocasiones fuera más el tercer centrocampista que atacante.
Un rendimiento para ilusionar
El ex del FC Barcelona, que precisamente resolvía su venta y futuro a comienzos del otoño y antes del Mundial, está sin duda liberado desde entonces. Y a su gran rendimiento en el combinado colchonero, con 6 goles y 4 asistencias en 21 partidos de la temporada actual, el galo sumaba sus excelentes actuaciones con su selección.
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Por tanto el delantero galo sigue demostrando a sus 31 años tener cuerda para rato. Y seguirá siendo un efectivo sumamente valioso para Diego Simeone a la hora de liderar y guiar a la escuadra rojiblanca en la segunda y decisiva parte de la temporada.
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