El entrenador francés prepara ya el regreso de La Liga con los blancos pero tiene otros asuntos en mente, aunque uno parece resuelto.
El Real Madrid afronta este atípico final de temporada a causa de la crisis del Covid-19, con 11 jornadas de Liga por jugarse en apenas un mes desde el siguiente fin de semana. El cuadro blanco afrontará después la vuelta de octavos de final de la Liga de Campeones ante el Manchester City.
Será entonces cuando se defina la campaña, si los blancos pueden remontar el resultado de febrero con esa derrota en casa o si despiden el curso ese día. En cualquier caso y aunque falten semanas para ello, muchas informaciones comienzan a anticipar posibles escenarios.
Un futuro definido
Pero el equipo de Chamartín comienza ya a tener claro cuál será el futuro de su entrenador, porque pase lo que pase en este final de campaña (aunque no haya títulos), el francés seguirá. Ya ha ganado la Supercopa de España y Florentino Pérez no se plantea un futuro sin su entrenador fetiche, con contrato hasta 2022.
El crédito que ha ganado ya en los últimos años, unido al hecho de que la crisis sanitaria ahora lo marca todo, y la idea de que el proyecto no está completo, dan bastante margen de maniobra a este preparador.
Más información
Noticias