La aparente depreciación que ha sufrido Federico Chiesa en estas últimas semanas podría favorecer su cambio de aires. La Juventus está dispuesta a aprovechar la ocasión y ya prepara una oferta en la que incluirá varias monedas de cambio.
Al término del último choque ante el Hellas Verona, el joven Federico Chiesa (22 años) colocó su dedo índice a la altura de los labios e hizo ese ya famoso gesto de mandar callar. Aunque no queda claro a quién iba dirigido, los medios italianos sí que coinciden en indicar que esa señal pone de manifiesto el creciente desencuentro entre el futbolista y su club, la Fiorentina.
En Tuttosport aprovechan esta circunstancia para añadir que el transalpino podría cambiar de aires al término de la presente temporada y situar a la Juventus como principal favorito para hacerse con sus servicios. Los bianconeri podrían aprovechar el actual escenario para reclutar a un jugador cuyo precio sería ahora más bajo por la delicada situación económica que atraviesa el fútbol europeo.
Ya que, pese a esa supuesta depreciación, el atacante seguirá exigiendo una inversión importante, la Juve se plantea incluir en su oferta el traspaso de algún jugador que pueda resultar interesante para el cuadro viola. En este sentido, el rotativo pone sobre la mesa cuatro nombres: el meta Mattia Perin y los zagueros Luca Pellegrini, Christian Romero y Daniele Rugani.
Forjado en la cantera de la Fiore, Chisea apareció en la primera plantilla durante el curso 2016-2017 y desde entonces ha logrado acumular un total de 144 partidos oficiales (29 goles y 21 asistencias) . Además, en este periodo, el versátil extremo se ha consolidado en las convocatorias de la Selección de Italia absoluta (17 veces internacional, un tanto).
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