Miralem Pjanic, ¿la solución buscada o un nuevo parche para el FC Barcelona?

La pérdida de identidad sufrida progresivamente por el FC Barcelona en el último lustro, materializada especialmente en las grandes decepciones de la Champions League, tiene mucho que ver con el bajón general de nivel en su centro del campo. Solamente Sergio Busquets se mantiene pero ni es el mismo ni está tan bien rodeado como antaño.

Hay quien piensa que Frenkie De Jong rendiría mejor en su demarcación, como pivote, pero el de Badía no ha dado motivos sólidos (o nadie se los ha arrebatado) para perder peso. En cambio, y aunque el holandés ha dejado buenos detalles, la pérdida de protagonismo de Ivan Rakitic, la falta de regularidad de Arturo Vidal, las dudas recurrentes sobre Arthur Melo y la inoperancia de los canteranos empleados en ese puesto (Aleñá, Sergi Roberto o Riqui Puig), dejan al cuadro culé con clara necesidad de apuntalar su centro del campo.

Eso por no contar con que habrá salidas en esa zona de la plantilla de algunos de los señalados. También se puede dar la alternativa a Pedri (cedido en la UD Las Palmas) pero parece pronto para entregarle todo el peso. Es por ello que Miralem Pjanic se ha revelado estos días como el gran deseo para mejorar el centro del campo de Quique Setién.

¿Opción de transición?

Este jugador de 30 años podría llegar con alguna de las fórmulas de trueques de las que se ha hablado y nadie duda de que sería un fichaje de rendimiento inmediato. Uno de esos que ayudan a subir rápidamente el nivel general del equipo en momentos bajos, cambian dinámicas y además aportaría más fluidez en ataque para que Lionel Messi pueda decidir con mayor asiduidad y comodidad en ataque.

Pero obviamente genera dudas. La edad media de la plantilla seguiría siendo alta, en un futbol cada vez más físico, factor previsiblemente decisivo a tenor de la nueva temporada más corta e intensa que se planteará tras la crisis sanitaria. Y no es ese tipo de jugador. Además podría eclipsar a otros necesitados de minutos como los canteranos o el propio Arthur Melo.

Es posible por tanto que, habiendo además elecciones en un año, podamos hablar de un fichaje de transición, que pueda estar un par de temporadas hasta consolidar otro proyecto que inicialmente comenzaría a mediados de 2021. O quizás no, de su rendimiento dependería… si es que ficha.