La escuadra andaluza afronta en las siguientes semanas uno de sus mayores retos en la historia reciente. Salvar la categoría mientras pelea por otra Europa League… Pero sobre todo está en juego el futuro de la entidad.
Sin entrar a valorar la situación también convulsa de la propia directiva (aunque todo esté relacionado), en lo estrictamente deportivo se enfrenta el Sevilla a su etapa más delicada desde comienzos de siglo. De hecho desde que ganar en 2006 la primera Copa de la UEFA, lo normal es que los andaluces hayan estado en los puestos de honor.
Coleccionaron muchos más títulos en estos 17 años, donde con Monchi al mando de la dirección deportiva (excepto en un corto periodo de tiempo), los hispalenses lograron afianzarse entre los cuatro mejores equipos de España de forma regular. Hasta que saltaba todo por los aires este curso, después de una deficiente planificación que ha señalado a este dirigente.
Un mercado sumamente incierto
Los problemas económicos derivados de las medidas y restricciones de la pandemia han afectado a este club como a todos. Y como no se acertó con las incorporaciones tras varias salidas estivales, el equipo se ve abocado a pelear por eludir el descenso a falta de doce jornadas para el final. Con su tercer entrenador del curso tras la llegada de José Luis Mendilibar.
Como cuenta el diario As que este club, con una deuda cercana a los 100 M€ y menos ingresos previstos para la temporada que viene, deberá apretarse el cinturón. Probablemente haya ventas dolorosas y apenas fichajes millonarios. Gattoni está confirmado como primera apuesta del curso que viene pero Monchi tendrá que tirar de nuevo de recursos para poder confeccionar la plantilla al menor coste posible.
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