Liga | El Cádiz asalta Balaídos

Ambos necesitados de punto después de un inicio de temporada en el que habían sido incapaces de sumar victoria alguna, Celta y Cádiz se veían hoy las caras sobre el césped de Balaídos. Aunque estamos apenas en la quinta jornada, el choque ya tenía ciertos tintes de tensión, pues una derrota por cualquiera de ambas partes podría comenzar a dejar víctimas.

Contaba con más urgencia el cuadro Vigo. Con tan solo un punto, el equipo de Coudet ha arrancado la temporada muy por debajo de lo esperado y comenzaba la jornada en puestos de descenso. Y así la acabará. Y es que el Cádiz se ha llevado los tres puntos de tierras gallegas mostrando una notable solidez que ya le dio buenos réditos el curso pasado.

El Cádiz desequilibra el partido en la primera parte

Así, la victoria visitante se cimentó en una primera mitad que acabó ya con 0-2 para los de Álvaro Cervera. Pese a que los célticos tenían el dominio del choque y eran dueños de la posesión, los andaluces fueron los que se mostraron mucho más efectivos y gracias a los goles de Choco Lozano (38’) y Espino (43’) -aprovechando el rechace del guardameta Dituro al lanzamiento de penalti de Salvi- los que encarrilaron el choque.

Salió el Celta de Vigo con ganas de remontar en la segunda mitad y completamente volcado al ataque. Coudet dio salida a Denis Suárez, Fontán y Cervi para que Nolito, Brais y Thiago comparecieran en el terreno de juego.

Reacción insuficiente del Cádiz

Y la presión local dio sus resultados. Santi Mina logró reducir distancias en el minuto 64 para dar emoción a los últimos veinticinco minutos de partido. El equipo local insistía y las ocasiones se sucedían, si bien el gol no terminaba de llegar. Así, cuando el partido se metía en el último cuarto de hora, el empate parecía tan solo cuestión de tiempo.

Sin embargo, no fue así. El Cádiz resistió pertrechado en defensa y se llevó una victoria que vale su peso en oro con vistas a todo lo que viene por delante. No lo hizo sin sufrimiento, pues Iago Aspas estrellaba un balón contra el travesaño cuando apenas había transcurrido un minuto de los seis de añadido. Murillo también se topó con el larguero cuando tan solo restaban unos segundos. No hubo tiempo para más y el Celta de Vigo tendrá que esperar para sumar su primera victoria de la temporada.