Bayern Múnich | Los primeros problemas que debe resolver Thomas Tuchel

Ha pasado una semana desde que estallara la gran bomba de la temporada en el fútbol alemán. Esa destitución de Julian Nagelsmann como entrenador del Bayern Múnich y la llegada al cargo de Thomas Tuchel posteriormente. Confirmada el viernes y presentado el sábado en sala de prensa el nuevo entrenador alemán. Que tiene Clásico este sábado para debutar.

Dirigía el técnico su primer entrenamiento el lunes y tuvo una interesante charla de 12 minutos con Leroy Sané, jugador que quiere sea fundamental en sus planes. Posteriormente fue recuperando internacionales para preparar este encuentro. Pero cuenta Bild este jueves que ya conoce el panorama que ahora le espera en el Allianz Arena y las dificultades a las que se enfrenta que no son precisamente sencillas de lidiar.

Varias preocupaciones por solventar

Serge Gnabry, Joao Cancelo, Ryan Gravenberch o Sadio Mané son algunos de los jugadores cuyo futuro puede cambiar, por diferentes motivos, de los que quiere sacar lo mejor. Y habla el citado medio también de encontrar la fórmula para ir dando entrada a los jóvenes Mathys Tel, Arijon Ibrahimovic y Paul Wanner (17 años). Pero también encontrar ahora equilibrio en un vestuario dividido, según el citado medio.

En el mismo habitan al parecer varios clanes (Kimmich y Goretzka estaban a favor de Nagelsmann y Neuer, Ulrich, Mané, Sané, Gnabry, Musiala y Cancelo estaban en contra) y los problemas persisten. En el caso de Neuer, tras haber despedido el club hace semanas al anterior entrenador de porteros, deberá gestionar esa competencia con Yann Sommer que ahora es el titular, y que en unos meses puede ser complicada.

También tendrá que asegurarse de poner en su lado a Joshua Kimmich y Leon Goretzka, líderes y portavoces del equipo de Nagelsmann. Lo mismo con Thomas Müller, que tiene un estatus especial. Y lo mismo ocurre con Kingsley Coman, que dirige el grupo francófono del Bayern Múnich (Upamecano; Hernández, Pavard) junto a Eric-Maxim Choupo-Moting, al que ya tiene a su lado . Igual que con Matthijs de Ligt, que es el líder de la parte holandesa del vestuario (Blind y Gravenberch). Todo un equilibrio delicado que deberá gestionar.