Apenas tiene 20 años pero ser el fichaje más caro en la historia del club rojiblanco lo ha colocado en la tesitura de tener que ofrecer un rendimiento inmediato y constante.
Salía goleado el Atlético de Madrid de su visita al Bayern Múnich, una derrota esperada por una parte, en la que los bávaros aprovecharon su clara superioridad. Los de Diego Simeone, no obstante, deben reponerse para una carrera de fondo como es la temporada y en la que hay algunos motivos para la esperanza, pese a que hoy no lo parezca.
Uno de ellos es Joao Felix. Si bien es cierto que estuvo blando en la pelea de balón con Kimmich que generaba la primera diana de los alemanes, fue también el jugador que más peligro llevó en ataque. Además en su zona natural, moviéndose entre líneas con buenas conducciones, y anotando incluso un gol que anulaba el VAR.
Su necesario paso al frente
Suma además 1 gol y 1 asistencia en los 5 partidos que ha disputado esta temporada, en una escuadra que claramente tiene una falta de definición que lastra muchas de sus actuaciones. Por eso el luso debe dar ese paso al frente con el que convencer a su técnico para tener mayor regularidad y ahora la lesión de Diego Costa podría ayudarle a asentarse.
No tiene la pujanza de Marcos Llorente ni el gol de Luis Suárez pero calidad y talento a raudales. Si aprovecha sus minutos y su entrenador logra encontrarle su mejor posición, en la mediapunta y con capacidad de caer a las bandas, además de sorprender desde atrás, podría cambiar el signo de muchos partidos.
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