Pese a realizar un encuentro bastante completo, el Barça vuelve a quedarse con la miel en los labios. Tras la diana de Joao Félix al culminar una estupenda jugada (iniciada por Frenkie de Jong), una genialidad de Hugo Guillamón sellaría las tablas en Mestalla.
La encrucijada del FC Barcelona vuelve a ser curiosa en una semana que podía acabar siendo un auténtico desastre en caso de consumarse su tercera derrota seguida. Para empezar, sufrió un golpe de realidad ante un Girona que fue mejor en casi todas las facetas del juego para hacer un traje a medida al vigente campeón liguero. Por si fuera poco, pese a tener ya el billete para octavos, sufrió un duro revés en el feudo del Amberes (en Champions). Por tanto, los culés pretendían curarse las heridas en Valencia.
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El mítico Rubén Baraja contaría una vez más con un Giorgi Mamardashvili que está en la agenda de futuribles del Real Madrid para su portería. Un fantástico cancerbero que quedaría resguardado en su defensa por Thierry Rendall, Cristhian Mosquera, Mouctar Diakhaby y Jesús Vázquez. Por delante, tanto Hugo Guillamón como Pepelu se multiplicarían en la medular para dar libertad a Fran Pérez y Diego López. En ataque, la dupla de Roman Yaremchuk y Hugo Duro.
Por lo que respecta a Xavi Hernández, calcaría prácticamente el once inicial que presentó en el compromiso frente a los gerundenses. Así las cosas, el canterano Iñaki Peña estaría acompañado por Joao Cancelo, Ronald Araujo, Jules Koundé y un Alejandro Balde que retomaba la titularidad. En cuanto a la sala de máquinas, dispondría de un trío de ases con la magia de Frenkie de Jong, Ilkay Gündogan y Pedri. En busca del gol, el tridente de Raphinha, Joao Félix y Robert Lewandowski.
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Mamardashvili, el muro con el que se topa el Barça
Como viene siendo costumbre, el Barça concedería en demasía en la zaga al arrancar el choque. De esta manera, Iñaki realizaría una parada soberbia para evitar el gol de un Yaremchuk que se quedaría con la miel en los labios. Pese a ello, el cinco veces ganador de la Champions empezaría a tomar las riendas del encuentro a partir de la posesión del esférico. Todo ello, además, con un Pedri que se mostraba bastante activo en la generación del juego.
Por su parte, Lewy estaría realmente incisivo en el interior del área che, chutando en más de una ocasión para propiciar más de una reacción espectacular de Mamardashvili. Es más, una de esas intervenciones sería de mucho mérito ante el acrobático remate de un internacional polaco que desea recuperar su mejor versión. Diakhaby se anticiparía de forma magistral, a lo que conviene agregar que Pepelu es el motor del centro del campo de los blanquinegros.
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Tampoco se puede descuidar a un Gündogan que, muy a su pesar, no estaba preciso con los controles, perdonando más de una vez en posiciones idóneas para ver portería. La falta de puntería estaba lastrando a los culés, pero todo cambiaría con una genialidad de Frenkie prolongada por Raphinha y concluida por Joao Félix a placer (0 – 1). Eso sí, un gol de muy bella factura de Guillamón devolvería la paridad al luminoso (1 – 1). Mamardashvili ganaría la partida a Raphinha y Ferran Torres, mientras que Yarek Gasiorowski salvaría bajo palos. Así las cosas, el Barça dejaría con vida al Valencia en Mestalla.
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