Liga de Campeones | El Real Madrid doblega al Shakhtar a medio gas

Regresaba el Real Madrid al Santiago Bernabéu. Y lo hacía inmerso en una complicada racha de resultados y con dos empates y una derrota en los últimos tres partidos disputados en su estadio. El rival en esta ocasión era un Shakhtar que se presentaba como el rival ideal para sumar tres nuevos puntos y dejar prácticamente encarrilada su clasificación para los octavos de final de la Liga de Campeones.

Los ucranianos, incapaces de ofrecer resistencia alguna en el partido de la primera vuelta disputado hace apenas unos días (0-5) llegaban al fondo de la tabla con tan solo un punto después de tres choques. En esta situación, los de Carlo Ancelotti salieron con chispa y no tardaron en asediar la portería del joven Trubin. Así, Luka Modric estaba a punto de abrir el marcador cuando todavía no se había alcanzado el quinto minuto de envite, si bien los visitantes también tuvieron una clara en el 9 que acabó estrellándose en el palo de Thibaut Courtois.

El Real Madrid marca y se echa a dormir

Las llegadas se sucedían y los blancos acabaron por inaugurar el marcador. Fue gracias a Karim Benzema. El galo empujaba al fondo de las redes una asistencia de Vinicius después de que el propio jugador brasileño aprovechara una indecisión defensiva de Marlon para robarle el esférico y servírselo en bandeja al de Lyon. Era el gol número 1000 del Real Madrid en la máxima competición, más que Manchester United y Juventus juntos. Casi nada.

Sin embargo, tras el gol, el Real Madrid se dejo llevar. Los blancos se diluyeron en su propio dominio y acabaron perdieron incluso la pelota. Los ucranianos dieron un paso al frente de la mano de sus brasileños y acabaron empatando por medio de Fernando en el minuto 38. Antes, el propio delantero había tenido una ocasión clara (minuto 32) que ya pudo ser el 1-1.

El tanto visitante no espabiló a un Real Madrid que seguía a merced de Shakhtar y estuvo a punto de irse con el marcador en contra después de una nueva acción de Fernando que casi acaba en gol (44'). Así, los blancos se marcharon al túnel de vestuarios entre los pitos de una afición muy crítica con el juego que habían desplegado los suyos y la displicencia evidenciada.

Vinicius, otra vez protagonista

El inicio de a segunda parte no supuso un cambio en la dinámica del choque. Los visitantes metían el miedo en el cuerpo a un Real Madrid demasiado relajado y que no parecía saber lo que se jugaba. Los de Ancelotti se veían muy superiores y tan solo esperaban la ocasión ideal para lanzar su zarpazo. Y esto es precisamente lo que sucedió.

Fue el minuto 60, cuando volvió a emerger la figura de Vinicius. El brasileño, cansado del flanco izquierdo se movió a la derecha, combinó con Lucas Vázquez primero, y con Casemiro después, para después servir el esférico a Karim Benzema. El galo aprovechaba el regalo del canarinho para poner el 2-1 y quitar un peso de encima tanto a los espectadores como al propio equipo.

Pese a que retaba media hora y todo hacía presagiar que el tanto descosería aún más el choque y podríamos ser testigos de más goles, no fue así. El Real Madrid acabó imponiéndose por la mínima y logra tres puntos más que no solo le permiten abrochar la clasificación, sino también acercar mucho la primera plaza.