Nations League | Portugal reina en Múnich por penaltis
Final trepidante entre Portugal y España en el Allianz Arena, escenario donde Nuno Mendes ha firmado una auténtica exhibición casi desde el arranque del duelo. En una contienda que se ha resuelto desde el punto fatídico, el cuadro luso ha conquistado el trofeo de la Liga de Naciones.

Francia ha impuesto su ley a costa de la anfitriona Alemania en la lucha por el tercer puesto de la Nations League. Pese a la buena actuación de Marc-André ter Stegen, nada ha podido hacer el arquero del FC Barcelona para frenar el ciclón de Kylian Mbappé. Dicho lo cual, los focos mediáticos apuntaban directamente hacia la gran final de un estupendo torneo que -de hecho- defiende la vigente campeona de la Eurocopa.
A saber, nos referimos a una Selección Española que, precisamente, consiguió sufrir y resistir de lo lindo contra Les Bleus para llevarse el gato al agua en su primer asalto de esta final four. Bajo el magnífico liderazgo de Luis de la Fuente, el combinado de nuestro país confiaba en repetir de nuevo la fórmula del éxito en la batalla de este domingo. Un duelo ibérico en el que mediría sus fuerzas con las de Portugal.
Por lo que respecta a las tropas de Roberto Martínez, quien iba a vivir un compromiso muy especial, habían superado a Alemania con la revolución de Francisco Conceiçao. Un atacante que, además, vería recompensado su esfuerzo y su estupenda actuación ante los germanos con la titularidad en el once para enfrentarse con La Roja. En este escenario, todo estaba preparado para un envite que se antojaba realmente frenético en Múnich.
Portugal se alza con el título en Múnich
El duelo arrancaría con un ritmo trepidante, comenzando con una transición rápida de los lusos. Una acción que acabaría con un remate de Joao Neves, futbolista que iba a sufrir de lo lindo en su duelo particular con Nico Williams. Una baza de la que pretendía sacar provecho el equipo español, buscando ese desequilibrio y descaro -en el buen sentido- de sus dos extremos. Por tanto, alcanzado el ecuador de los 45 minutos iniciales, una maniobra de Mikel Oyarzabal desataría la acción que resolvería Martín Zubimendi con precisión para abrir la lata.
Nico comenzaba a ser un quebradero de cabeza para su adversario, propiciando que la retaguardia lusitana estuviese pendiente en labores de cobertura. Dicho lo cual, Portugal iría ganando presencia en campo contrario, creciendo con el transcurso de este apasionante encuentro. Así las cosas, nivelaría las fuerzas gracias a un Nuno Mendes que es un verdadero puñal por el flanco izquierdo. Pese a que existía la duda de la posición de Cristiano Ronaldo, el gol subiría al luminoso en el Allianz Arena. A pesar del mazazo anímico, La Roja seguía rompiendo líneas desde atrás con Dean Huijsen, junto con un Pedri que quería adueñarse del control del choque.
Vitinha también quería imponer su ley, pero sería Pedri el que realizaría una gran conducción para habilitar a un Oyarzabal que convertiría el 1 – 2 con un toque muy sutil. Roberto tiraría de fondo de armario con un doble cambio para la segunda mitad, mientras que la diana de Bruno Fernandes no sería legal por fuera de juego de Pedro Neto. Aun así, el sempiterno Cristiano nivelaría la final al aprovechar el caramelo de un inspirado Nuno -exhibición la suya-. Diogo Costa echaría el cerrojo ante un zapatazo de Isco Alarcón, por lo que el duelo se marcharía a la prórroga. Rafael Leao y Mendes generaban mucho peligro por la izquierda, pero Portugal se ha alzado con el título por penaltis (5 – 3).
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