El Bayern Múnich tenía la eliminatoria controlada con el zarpazo de un Alphonso Davies que será uno de los protagonistas del mercado estival. Sin embargo, el Real Madrid ha vuelto a realizar una gesta europea con el doblete sobre la bocina de un Joselu que será recordado como un héroe. Por tanto, los blancos jugarán la final de la Champions ante el Borussia Dortmund.
Las espadas ya se encontraban en su punto más elevado con la ambición de certificar el otro billete para la gran final de la presente edición de la Liga de Campeones. Una cita en la que estará presente el Borussia Dortmund, dado que el combinado germano ha sabido frenar a un PSG que se vio frustrado por la madera en múltiples ocasiones. Sin embargo, los focos se centraban en el compromiso de vuelta entre dos de los colosos más emblemáticos del panorama continental: Real Madrid y Bayern Múnich.
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Carlo Ancelotti se presentaría de entrada con un Andriy Lunin que ha dejado grandes actuaciones en cada una de las rondas de esta fantástica competición. Así las cosas, el ucraniano, cuya renovación estaría encaminada, contaría con el apoyo en defensa de Dani Carvajal, Antonio Rüdiger, Nacho Fernández y Ferland Mendy. La estabilidad en la medular sería la misión de Aurélien Tchouaméni, Toni Kroos y Fede Valverde, dejando a Jude Bellingham como enganche con Rodrygo Goes y Vinícius.
Pasando a la disposición táctica de un Thomas Tuchel que ha vuelto a dejarse querer por la Premier League, el guardián de sus dominios sería el mítico Manuel Neuer. Por delante, un sistema de cuatro piezas del nivel de Joshua Kimmich, Matthijs de Ligt, Eric Dier y Noussair Mazraoui para contener a su rival. El doble pivote correría a cargo de Konrad Laimer y Aleksandar Pavlovic, mientras que Leroy Sané, Jamal Musiala y Serge Gnabry surtirían de balones a Harry Kane.
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Doble intervención muy meritoria de Neuer
La puesta en escena de los blancos sería muy positiva, imponiendo un ritmo frenético al que también respondería su contrincante. Eso sí, al menos en los compases iniciales del choque, la iniciativa sería para un Real Madrid que estaría liderado por un activo Vinícius. La primera acción con cierta sensación de peligro sería de Carvajal, cuyo envío se pasearía por el área muniquesa. Y la réplica tendría lugar en las botas de un Gnabry que quiso asociarse con Sané.
Por su parte, Ancelotti había concedido libertad absoluta en punta de lanza a su dupla brasileña. De hecho, Vini pondría a prueba a un Neuer que desviaría el chut con la ayuda de la madera, estando imperial también en el rechace con un paradón a Rodrygo. La nota negativa se produciría con la lesión muscular de un Gnabry que ya estaba entre algodones, dejando su plaza al deseado Alphonso Davies. Y qué decir del golpeo acrobático de un Vinícius que lo probaría con una chilena.
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Es verdad que ambos equipos habían rebajado las pulsaciones del duelo, aunque Kane efectuaría un tremendo zapatazo que daría pie a una reacción fantástica de Lunin. Con el transcurso del compromiso, el Bayern se iría sintiendo cada vez más cómodo a través de posesiones largas que inquietaban a la hinchada local. Bellingham se estaba sacrificando con un notable despliegue físico, al tiempo que De Ligt se multiplicaba como el mariscal de los alemanes.
Joselu se viste de héroe para estar en Wembley
Vinícius volvería a ser el agitador en ataque, realizando un centro-chut que se fue envenenando y acabaría con una nueva parada de Neuer en el Santiago Bernabéu. En la portería opuesta, Lunin estaría muy atento para ganar la partida a Mazraoui y a un Kane que sería habilitado por Musiala. Asimismo, Kimmich estaba sufriendo de lo lindo en su pulso con un Vini cuyo desborde no fue culminado por Rodrygo por poco. Neuer estaría inconmensurable otra vez ante los brasileños, destacando a un Vinícius que estaba dando un recital ofensivo.
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Y cuando más superior estaba siendo el Real Madrid, Davies abriría la lata con una diana de bella factura (0 – 1). La respuesta sería inmediata con el zarpazo de Valverde, pero el trencilla, al consultar el monitor, no daría validez al gol por falta previa de Nacho. En las postrimerías de los 90 minutos reglamentarios, el único error (garrafal) de Neuer sería aprovechado por Joselu Mato para convertir el 1 – 1. Y ya en el tiempo añadido, en una acción corroborada por el VAR, el doblete de Joselu desataría la locura en Concha Espina (2 – 1). Con una nueva remontada épica en Europa, el Real Madrid se ha citado con el BVB en la final de la Champions de Wembley.
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