Partido sumamente disputado que se decidió al final con dos goles tardíos. Los de Xabi Alonso sacan un empate de gran importancia en el Allianz Arena, tras haber exhibido un gran nivel colectivo en todo el partido.
Duelo en la cumbe. Con nueve puntos ambos en las tres primeras jornadas de la Bundesliga, se citaban en el Allianz Arena este viernes Bayern Múnich y Bayer Leverkusen para abrir la cuarta jornada. Encuentro con gran expectación que pronto comenzaban ganando los locales, tras iniciar el choque con una presión asfixiante y claro dominio, materializado en la diana de Harry Kane que anotaba a placer de cabeza en el 7' tras un saque de esquina.
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El goleador inglés abría el marcador pero los de Xabi Alonso no se pusieron nerviosos. Poco a poco con cambios como el de Hofmann de banda, y el gran trato de pelota que acostumbran ahora, fueron saliendo de la cueva. Llegando más a los dominios de Sven Ulreich hasta que Alejandro Grimaldo anotaba un golazo de falta en el 24'. Nivelaban el choque los visitantes, que marcarían otro gol por medio de Victor Boniface, anulado por un ajustado fuera de juego.
Los bávaros, heridos en el orgullo, trataron de tirar de casta y sus habituales arreones para volver a adelantarse en el marcador. Pero el segundo gol no pudo llegar en esa primera parte, pese a tener algunas ocasiones claras de jugadores como Leroy Sané. Pero era evidente que los de Xabi Alonso habían logrado incomodar bastante a su rival hoy.
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Un final loco
Ya en la segunda parte, a los de Thomas Tuchel les costaba encontrar su ritmo habitual porque el Bayer Leverkusen seguía manteniendo maniatados a los campeones. De hecho el entrenador local terminaría por buscar algo diferente dando entrada a Jamal Musiala, que volvía de lesión, por un cariacontecido Josuha Kimmich que claramente parece haber perdido su confianza. Si bien los visitantes mantuvieron firme su idea.
El buen trato de pelota de los de Xabi Alonso, su rigor táctico y la calidad de muchos de sus jugadores lo convierten en un equipo sumamente trabajado que dará mucha guerra este curso. Y en el 78' además Florian Wirtz se encontraba con el palo ante Ulreich en una ocasión clarísima para haber adelantado a los visitantes. En el 81' era Boniface el que casi marca, ya que el Leverkusen seguía sometiendo claramente a los locales que no lograban hacerse con la pelota.
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Pero cuando perdonas al gigante alemán lo sueles pagar. Y en el 87' fue Leon Goretzka quien ejecutaba la sentencia, adelantando a los de Tuchel casi en el final del partido. Fue una jugada por la izquierda de Tel, se marcha de Kossounou y su pase de la muerte lo remata el centrocampista germano a placer. Pero cuando el encuentro parecía acabar así, un penalti transformado por Exequiel Palacios en el 94' servía a los visitantes para igualar el choque. Un 2-2 que hace justicia a lo visto este viernes y que deja a ambas escuadras con 10 puntos. Xabi Alonso parece haber encontrado la manera de frenar al gran campeón alemán, que lo intentó al final pero el gol de Upamecano fue anulado por fuera de juego.
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