La inevitable "operación salida" que debe afrontar el Real Madrid

Antes de entrar, dejen salir. Ésa es la sencilla máxima que regirá los próximos movimientos del Real Madrid. Los blancos no descartan reforzar su plantilla durante el mercado estival, pero tienen claro que para poder afrontar los nuevos fichajes deberán antes hacer caja con la venta de aquellos jugadores que, por unos motivos u otros, no entran en los planes de Zinedine Zidane.

Las dos grandes salidas que anhela la entidad son las de Gareth Bale y James Rodríguez. Ambos jugadores han quedado relegados a un completo segundo plano a lo largo del presente curso y su continuidad en el club se ve ya más como una carga que como una muestra de la fortaleza de la plantilla. Su salida, eso sí, no resultará fácil. Al menos en las condiciones que desearía la entidad, ya que, dadas las actuales circunstancias, ningún posible pretendiente tiene ahora mismo capacidad para pagar las cantidades que desearía recaudar el conjunto de Concha Espina.

Un importante ahorro salarial

Aunque no parece que vaya a resultar muy rentable, la marcha de este par de jugadores sí implicaría un importante ahorro en términos salariales, ya que se trata de futbolistas con un sueldo elevado. "La salida de ambos reduciría en 23,5 millones netos la masa salarial del club blanco, lo que en términos absoluto rondaría los 40 millones de ahorro", explica OK Diario.

Además de para esta pareja, el Real Madrid busca acomodo para otros jugadores como Brahim Díaz (se anhela un traspaso con opción de recompra), Mariano Díaz, Lucas Vázquez y Nacho Fernández. Asimismo, en otros medios se asegura hoy que los blancos no descartan la venta del delantero serbio Luka Jovic quien ni ha ofrecido un buen rendimiento en el campo ni se ha comportado con un mínimo de profesionalidad fuera de él.