La decaída de Andy Robertson

El Liverpool de Jürgen Klopp llegó a dominar Europa gracias a ese fútbol vertiginoso en el que tanto los extremos como los laterales cobraban un papel central. Trent Alexander Arnold era una máquina de dar asistencias desde la derecha, pero Robertson no se quedaba atrás desde la izquierda, y de hecho es el defensor con más pases de gol en la historia de la Premier League.

Año tras año, el costado siniestro de Anfield tenía nombre y apellidos de forma indiscutible, tanto como para que el que se supone que iba a ser su relevo a medio plazo, Kostas Tsimikas, haya tenido que salir rumbo a la Roma porque su maduración ha coincidido con la excelencia del escocés. Ahora que ha bajado algo el listón, es Milos Kerkez el que le ha quitado el puesto.

En el mercado de traspasos del Liverpool, en el que no se ha escatimado en gasto desembolsando 137 millones de euros por Florian Wirtz, 95 por Hugo Ekitike o hasta 150 por Alexander Isak, también ha habido tiempo para invertir en la defensa y además de los 30 kilos que se pagaron por Jeremie Frimpong, el Bournemouth recibió 45 para dejar marchar al húngaro.

Andy no daba el nivel

Lo cierto es que pese a que el sistema de Slot pareciera que no tenía carencias durante la Premier League 2024-2025, Robertson, un competidor nato desde sus inicios, era por primera vez en su carrera una debilidad en sí mismo, dejando unos despistes impropios de su concentración por partido y perdiendo esa pizca de velocidad que le permitía defender a campo abierto sin problemas.

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De cara al Mundial de Estados Unidos del próximo verano al que Escocia aspira a clasificarse, su puesto no corre peligro, ya que sigue dando el nivel como para ser titular en el combinado británico. Además, es un líder fuera del campo y de ninguna manera se quedaría fuera de la convocatoria en caso de que logren pasar el grupo como primera, o disputar la repesca, como segunda.

Andy Robertson, de 31 años de edad, disputó 45 partidos con el Liverpool la temporada pasada entre todas las competiciones, superando los 3.300 minutos de juego, en los que no marcó ningún gol pero sí dio dos asistencias.